Solbes discrepa del presidente y dice que el pacto ya es 'flexible'
El comisario europeo Pedro Solbes y el vicepresidente económico, Rodrigo Rato, se apresuraron ayer a defender el Pacto de Estabilidad Presupuestaria, cuestionado la antevíspera por el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi. Rato y Solbes coincidieron en un acto organizado por el Banco Europeo de Inversiones en Barcelona.
Sin aceptar preguntas de los informadores, un lacónico Pedro Solbes se limitó a leer un corto comunicado en el que discrepaba de su jefe, Prodi. Sin citar en ningún momento a Prodi, Solbes leyó: (...) 'La Comisión ha demostrado que el Pacto de Estabilidad es suficientemente flexible para dar cabida a políticas que tienen sentido económico'. Prodi había dicho la víspera que el pacto de estabilidad era rígido', además de 'estúpido' e 'imperfecto'. Solbes también dijo: 'Ninguna flexibilidad puede dar cabida a políticas económicas inadecuadas'. El comisario quiso tomar distancias en esta polémica al añadir que 'la parte más importante de mi responsabilidad como comisario de Asuntos Económicos es la de actuar como guardián del Tratado y del marco de la Unión Económica y Monetaria que gobierna la moneda única, el euro'.
Rato: 'Es imprescindible'
Rato también fue contundente en defender el Pacto de Estabilidad, aunque evitó extenderse en este asunto al afirmar: 'No quiero hacer declaraciones sobre declaraciones'. 'El pacto', añadió, 'es imprescindible, ya que con una política monetaria común la Unión Europea necesita una coordinación de sus políticas presupuestarias'. El vicepresidente segundo y ministro de Economía resaltó la 'buena salud' del Pacto de Estabilidad. Y agregó que 'España se suma a la declaración de 11 países miembros en Bruselas hace 15 días dando apoyo al pacto'.
Rato y Solbes se reunieron en Barcelona, en el Palau de la Generalitat, con los ministros de Finanzas de los Quince, los países asociados del área mediterránea, el presidente catalán, Jordi Pujol, y el del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Philippe Maystadt.
En la reunión se acordó un aumento de las inversiones del BEI a los países asociados del área del Mediterráneo, que pasarán de 1.400 millones de euros a 2.000 millones. Rato recordó que 'España planteará en su momento' que Barcelona sea la sede de la filial mediterránea del BEI. El BEI quiere incrementar sus créditos para el desarrollo de los países mediterráneos siguiendo las directrices de la cumbre europea de Barcelona el pasado marzo.
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