El deporte genera ya más riqueza en Euskadi que el sector agropesquero

El primer gran estudio sobre el impacto del deporte en la economía del País Vasco, presentado ayer, ha deparado sorpresas. La primera es que genera más riqueza de la que se creía. Su efecto sobre el Producto Interior Bruto (PIB) vasco es de 767 millones de euros (un 1,9%), con lo que supera ampliamente a sectores como el agropesquero, que ronda los 538 millones. Además, el deporte mantiene 18.837 empleos, un 2,2% del total.

El estudio, realizado por la consultora KPMG por encargo del Gobierno vasco y las tres diputaciones, destierra algunos mitos. Aclara, en primer lugar, que se trata de una actividad 'rentable' incluso para las instituciones. También revela que el deporte para todos duplican a las grandes cifras que maneja el deporte de élite.

El estudio sobre el impacto del deporte en la economía vasca se ha desarrollado en nueve meses de trabajos, y ha confirmado a este sector como un elemento importante de generación de recursos. En el País Vasco, esta actividad ha alcanzado cotas altas, en concreto un 1,9% del PIB, un nivel más que aceptable en comparación con los datos que se disponen del entorno. En el total de España se calcula que el deporte supone el 1,28% del PIB, mientras que en Francia se queda en el 1,24% y en Alemania alcanza ya el 2%.

El gasto directo relacionado con el deporte en Euskadi asciende a 855 millones de euros, de los cuales 767 son computables como generadores de riqueza dentro de los parámetros que se utilizan para configurar el PIB. Directa e indirectamente, 18.837 empleos dependen del sector. No obstante, el estudio ha calculado el 'efecto inducido' que el deporte produce en la economía vasca, es decir, el efecto cascada que se deriva de la actividad deportiva, y ha llegado a la conclusión de que genera otros 324 millones más y 7.879 empleos añadidos. Incorporando el efecto inducido, resulta que el deporte genera un 2,8% (unos 1.092 millones de euros) del PIB vasco, y un 3,1% de los puestos de trabajo.

Toda esta actividad se traduce en ingresos para las tres haciendas vascas a través de los impuestos (IVA, de Sociedades e IRPF), que ascienden a 108 millones de euros anuales. El estudio realizado por la consultora KPMG y avalado por las instituciones públicas defiende la 'rentabilidad' del sector, tanto para las empresas privadas como para la propia Administración. De hecho, el apoyo público al deporte llega a 52 millones. Por tanto, de cada euro aportado por las instituciones, revierten 2,07.

Los aficionados son el motor

La financiación pública significa una pequeña porción de los recursos que se manejan. De hecho, el estudio asegura que sólo contribuye a un 6,1% del gasto total, lo cual indica una fuerte presencia privada. Los ayuntamientos aportan un 51% de todo el esfuerzo público. En el deporte de élite, la presencia pública sólo abarca el 0,65% de los gastos.

En contra de lo que pudiera parecer, la mayor parte del gasto generado procede del deporte de base y aficionado, a pesar de las grandes cifras que manejan los clubes de élite. En concreto, el deporte para todos mueve el 51% de la actividad. Lo hace sobre todo a través de los gastos de los deportistas que no están federados, pero practican alguna especialidad regularmente, en cursos organizados por los ayuntamientos o por su propia cuenta. Sólo esa parcela genera un gasto de 237 millones de euros.

El deporte de élite supone el 23,5% del total, la mayor parte gracias a la capacidad que tienen los grandes clubes para obtener recursos. Los dos agentes más beneficiados de esta parcela son, por un lado, la Organización Nacional de Loterías y Apuestas del Estado, a través de las quinielas, que obtiene una recaudación en el País Vasco de 24,64 millones de euros, de los cuales sólo el 56% se queda en Euskadi vía premios, retorno a los clubes y a las administraciones de loterías. Por otro lado, la hostelería saca provecho directo sin necesidad de haber invertido previamente en el sector. Se calcula que gracias al pay per view (pago por visión de partidos de fútbol) este sector gana 18,86 millones de euros, un 9,4% del ingreso total del deporte de élite. Además, los aficionados que acuden a distintas competiciones en vivo dejan otros 9,4 millones de euros.

El verdadero motor de este sector económico es el deporte aficionado, no profesional. Se calcula que la mitad de la población vasca practica alguna especialidad, frente al 31% en toda España. El 8,83% de esos practicantes está adscrito a alguna federación. Euskadi cuenta con más de 3.000 clubes de todo tipo. Un deportista medio gasta 433 euros al año, de los cuales la mayoría está destinado a la compra de ropa y material deportivo.