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Vaersa despide a su jefa de prensa pese a que trabaja para Modrego

Un despido acaba de poner de manifiesto la falta de sintonía entre el director de la mayor empresa pública de la Consejería de Medio Ambiente, Valenciana de Aprovechamiento Energético de Residuos (Vaersa), y el titular de este departamento del Consell. El director de Vaersa, José R. Pérez-Lillo, despidió el pasado 12 de septiembre por una presunta dejadez laboral a la jefa de prensa de la empresa, que en realidad trabaja desde hace años física y funcionalmente en el gabinete del consejero Fernando Modrego, que por su cargo también es presidente de la empresa pública.

Ana María Gómez Cortés, abogada de la trabajadora despedida, Carmen Melià, tras comprobar que Vaersa no se presentó al acto de conciliación celebrado el 1 de octubre, acaba de poner una demanda por despido nulo. Una demanda que también deja traslucir una cesión irregular de trabajadores entre la empresa pública y la Administración y un presunto caso de mobbing o acoso psicológico en el trabajo, ya que se sostiene que Pérez-Lillo obligó durante unos meses a Melià a acudir físicamente a las dependencias de Vaersa para después, mientras su trabajo lo realizaba otro empleado, marginarla socialmente durante muchos meses sin ninguna tarea y en una mesa (antes tenía despacho) junto al lavabo de caballeros. Un supuesto acoso que llevó a la empleada a recurrir durante meses a un psicólogo, hasta que, se afirma, el gabinete de Modrego la reclamó de nuevo.

La falta de mediación de la consejería para resolver el desencuentro con Pérez-Lillo, y la ausencia de Vaersa del acto de conciliación puede desembocar en un par de meses en un juicio en el que tengan que desfilar a declarar, en periodo preelectoral, numerosas personas del entorno de Modrego.

Carmen Melià trabaja en el área técnica de comunicación de Vaersa, como relaciones públicas, desde febrero de 1998. Fija en la empresa, desde el principio desempeñó su trabajo en coordinación con la consejería. Sin embargo, a raíz del cese del director de Vaersa en tiempos del consejero de UV José Manuel Castellá, Alejandro Reig, que dimitió una semana antes de las elecciones de 1999 para irse al PP, la empresa quedó sin dirección un año.

Baja por depresión

Desde la llegada de Modrego, Melià se puso a las órdenes de éste, en su calidad de presidente de la firma, y desde entonces ha trabajado bajo la dirección de la jefa de prensa de la consejería, tanto en temas exclusivos de ésta como en propios de Vaersa, una situación sólo interrumpida entre abril y noviembre de 2001, cuando supuestamente sufrió el mobbing. Una orden de volver físicamente a Vaersa, en septiembre pasado, desembocó en una baja médica por depresión, durante la que se despidió a la empleada.

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El sindicato UGT ha exigido la inmediata incorporación de Melià a su puesto. El secretario general de la consejería, Jorge Lamparero, se desentendió ayer de la situación argumentando que se trata de una empleada de Vaersa y que será Pérez-Lillo el que tenga sus motivos para el despido. Y desde la empresa se declinó hacer declaraciones.

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