Una clave cuántica para mensajes secretos se mandó por el aire a 23 kilómetros
Científicos y técnicos de Alemania y el Reino Unidos han conseguido transmitir una clave de encriptación entre dos picos montañosos de casi 3.000 metros separados 23,4 kilómetros, en el sur de Alemania, lo que supone un récord en el emergente campo de la criptografía cuántica y abre el camino a un sistema mundial de distribución de claves por satélites en órbita baja.
Las claves de encriptación se utilizan para codificar y decodificar mensajes secretos y la transmisión de las claves debe ser a prueba de espías si se quiere conseguir total seguridad en las comunicaciones. La criptografía basada en las leyes de la mecánica cuántica proporciona esa seguridad, ya que resulta imposible la intercepción o modificación del mensaje sin que lo sepa el receptor.
El experimento, realizado por la empresa QinetiQ y la Universidad Ludwig Maximillians de Múnich, ha conseguido doblar la máxima distancia conseguida hasta ahora en este tipo de comunicación. Se han utilizado láseres en una cumbre para generar fotones (las partículas de la luz) polarizados, en el rango de la radiación infrarroja (longitud de onda de 850 nanómetros) que han sido recogidos por un telescopio en la otra cumbre. El experimento se ha hecho a gran altura y de noche para minimizar el efecto de las turbulencias atmosféricas y de la luminosidad. Los resultados se han publicado en la revista Nature.
La clave es un número elevado de bits generado al azar. Los fotones se pierden en su mayoría en este tipo de transmisión, por lo que resultan inadecuados para transmitir los mensajes, que en un sistema comercial se transmitirían codificados por cualquiera de los canales actuales y se descodificarían con la clave transmitida por el aire mediante enlace óptico con el satélite. Si alguien intentara conocer la clave, los fotones llegarían con cambios en su estado cuántico y se sabría.
El primer experimento de este tipo se hizo en 1998 y alcanzó un kilómetro. En 2002 un equipo estadounidense anunció que había alcanzado en Nuevo México los 10 kilómetros de distancia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.