ICV propone situar la biblioteca provincial en la zona de Sagrera

Hasta principios de noviembre no se espera una decisión oficial sobre si es posible compatibilizar o no la biblioteca provincial y los restos arqueológicos en el antiguo mercado del Born. Con todo, el grupo municipal de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) anunció ayer su posición. 'No es posible compatibilizar los restos, la biblioteca y la estructura de Fontseré en el Born', dijo Imma Mayol. ICV propone situar la biblioteca en la zona de Sant Andreu-Sagrera, en donde aseguró que hay dos solares municipales disponibles.

La presidenta del grupo municipal de ICV, Imma Mayol, detalló las razones de su rechazo a situar este equipamiento bibliotecario en el viejo mercado del Born: 'Hemos analizado el proyecto de compatibilización realizado por los arquitectos y nos merece todo el respeto, pero responde a un encargo que en sí mismo es equivocado. No es posible situar en el mismo espacio la biblioteca, musealizar los restos arqueológicos y proteger la cubierta de Fontseré. Entran con calzador y lo que se hace es minimizar la potencia y el atractivo de cada uno de ellos. La compatibilidad sería la solución más cara y peor'.

ICV considera prioritaria la biblioteca provincial y central urbana. 'Nos reafirmamos en la necesidad inexcusable de que Barcelona disponga de una biblioteca provincial en un plazo lo más breve posible', señaló Mayol.

Nueva centralidad

'Pensamos que este equipamiento puede contribuir a la renovación urbana y en este sentido hay que proponer solares disponibles municipales en donde puedan empezar las obras inmediatamente. Una propuesta, en la que no nos atrincheraremos, sería la de la zona de Sant Andreu-Sagrera porque esto equilibraría la zona norte de la ciudad. Con la llegada del AVE será una zona muy bien comunicada, un punto de encuentro metropolitano y de nueva centralidad de Barcelona'. Mayol opina que empieza a ser hora de romper con el discurso de que todos los grandes equipamientos culturales tienen que estar en el centro, 'sobre todo porque se entiende que el centro sólo es Ciutat Vella y Eixample'. En este sentido, propone dos posibles solares que están destinados a equipamientos. Uno, de 30.000 metros cuadrados, está situado frente al centro comercial La Maquinista y el otro, de 40.000 metros cuadrados, es el de los viejos cuarteles de Sant Andreu.

En estos solares, afirma, podría construirse un edificio de nueva planta perfectamente equipado para las necesidades de la biblioteca -cuyas condiciones de accesibilidad, capacidad de crecimiento y diversidad de espacios y funciones especificó extensamente- en un plazo de dos o tres años.

'El Estado tiene que saber que el hecho de cambiar de ubicación no tiene que ser una excusa para retrasar la construcción de la biblioteca. No es un capricho. Queremos cambiar porque ha habido un hallazgo que permite conocer una trama urbana histórica de gran relevancia', añadió Mayol. Aunque afirmó que no han discutido el asunto con sus socios de gobierno en el Ayuntameinto de Barcelona, Mayol señaló que en función de algunas conversaciones con concejales socialistas 'estaban de acuerdo con la no compatibilidad'. 'Tengo la sensación, aunque me puedo equivocar, de que es una fruta madura porque es de sentido común que no son compatibles', añadió.

Respecto al viejo mercado del Born, se suman a la propuesta de situar allí un 'centro cultural de nueva generación', según la propuesta de una comisión asesora del Museo de Historia de la Ciudad, centro que a su juicio debería gestionar este nuevo espacio público polivalente en cuya financiación, afirman, se necesitará la colaboración de la Generalitat. Esta solución implica, a su juicio, que tendrá que construirse una biblioteca de distrito en el barrio que, aseguran podría situarse en el Convent de Sant Agustí. 'El barrio ganaría un nuevo centro cultural único que combinaría historia con actividades lúdicas y también tendrá una biblioteca', afirmó Mayol.

El pasado mes de julio, Esquerra Republicana (ERC) también se manifestó contraria a la compatibilización y propuso que pudiera construirse la biblioteca en la antigua estación de Cercanías de Renfe, situada en el mismo barrio de la Ribera.

El Ministerio de Educación y Cultura, que financia la biblioteca, ha encargado tres estudios para analizar las posibilidades técnicas de compatibilizar la biblioteca y los restos. El director general de Patrimonio Cultural, Marc Mayer, señaló a mediados de agosto en un debate en la Universidad de Prada (Francia) que la decisión no podría tomarse antes de noviembre.