Siete ciudades vascas están entre las que más población han perdido en España

Siete grandes localidades del País Vasco figuran entre los 30 municipios españoles que más habitantes han perdido en los últimos 20 años. Eibar, Sestao, Rentería, Basauri, Portugalete, Santurtzi y Pasaia, por este orden, han experimentado una reducción media de 6.500 residentes entre 1981 y 2001, motivada en gran parte por los efectos de la desindustrialización y el descenso de la natalidad, entre otras causas.

El listado español de 'municipios más despoblados', elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), está encabezado por Barcelona y Madrid, cuya población censal se ha reducido en más de 200.000 personas en este periodo. Eibar, que ha bajado de 36.919 a 28.219 habitantes, ocupa el decimoprimer puesto, por delante de Sestao (baja de 40.374 a 31.773 vecinos) y Rentería (de 46.496 a 38.224). Basauri descendió de 52.554 a 45.085 personas; Portugalete, de 58.071 a 51.066; Santurtzi, de 52.919 a 47.173, y Pasaia, de 20.756 a 15.962.

El traumático proceso de reconversión industrial, los nuevos patrones de vida (la cultura del ocio) y el descenso general de la natalidad han ido menguando los padrones en estos municipios. Los últimos años de la década de los 80, que vivieron el declive del desarrollo económico que gozaron las localidades situadas en el eje de la ría del Nervión, llevaron a un fuerte descenso poblacional de Sestao, Basauri, Portugalete y Santurtzi. Un fenómeno parecido aconteció en otras áreas industrializadas del País Vasco, como en las localidades guipuzcoanas de Eibar, Rentería y Pasaia, donde el saldo migratorio fue creciendo sin detenerse hasta mediados de la década siguiente.

El alcalde de Portugalete, el socialista Miguel Ángel Cabieces, considera que su municipio ya ha tocado fondo y ha logrado mantenerse, con escaso margen, por encima de la frontera 'clave' de los 50.000 habitantes. 'En estas cifras nos movemos después de vivir un proceso de reconversión muy duro para cientos de trabajadores prejubilados y abocados al paro', afirma.

Esta localidad de la Margen Izquierda, castigada por el cierre de grandes factorías, en modo similar al de otras localidades vecinas, ha pasado de tener un censo de 58.071 habitantes en 1981 a 51.066 en 2001. 'El objetivo de Portugalete es no bajar de los 50.000 habitantes, porque de esa forma se nos considera como una gran ciudad y, además, podemos acceder a determinados programas de ayuda europeos'.

Cabieces advierte de que Portugalete es, como Barakaldo o Sestao, 'uno de los municipios españoles con mayor densidad urbana' y se sitúa en 'parámetros similares a los de Japón'. Ello explica la fuga de personas a los municipios vecinos de Ortuella, Gallarta o Trapaga, que han aumentado su padrón gracias a este trasvase.

Un 25% de parados

La crisis industrial también tuvo consecuencias sociales para Rentería, donde en la década de los 80 se creó una bolsa de parados que afectó al 25% de la población. Su alcalde, Miguel Buen, añade otro factor fundamental en la pérdida de población: 'La gran crispación política a finales del siglo pasado, con sabotajes y altercados protagonizados por los radicales hicieron muy desapetecible el clima social. Muchos vecinos se marcharon a San Sebastián y Hondarribia'.

Sin embargo, este municipio empieza a invertir la tendencia, asegura su regidor: 'Si creamos un clima sosegado y distendido, seremos capaces de frenar la despoblación, porque contamos con infraestructuras sanitarias, educativas, culturales y deportivas muy atractivas. No obstante, los efectos no llegarán hasta dentro de seis u ocho años', afirma Buen.

En el extremo contrario, el de los municipios que más han crecido desde 1981, sólo figura una localidad vasca: Vitoria. La capital alavesa ha ganado 27.319 habitantes hasta 2001, al pasar de 189.633 a 216.852 habitantes.