Pujol ultima una ley para involucrar más a las policías locales en la seguridad ciudadana

El Gobierno catalán ultima una ley para reforzar la participación de las policías municipales en las tareas de seguridad ciudadana y coordinarlas con la policía autonómica en las zonas donde operan los Mossos d´Esquadra. El proyecto de ley será aprobado, con toda probabilidad, el próximo día 25 y coincide con el debate político generado por el plan del Gobierno central para combatir la delincuencia. El consejero de Justicia, Josep Delfí Guàrdia, advirtió ayer de que el plan del Gobierno puede abrir una 'crisis institucional', ya que 'no se ha contado' con las comunidades autónomas.

La Ley de Ordenación del Sistema de Seguridad Pública de Cataluña, que es como se denomina el proyecto del Gobierno catalán, no afecta al funcionamiento ni a las funciones de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía ni de la Guardia Civil que operan en Cataluña porque la Generalitat carece de competencias para ello. Tampoco modifica las funciones que ahora tienen los Mossos d'Esquadra ni aumenta su plantilla. Su objetivo es dar cobertura legal a la coordinación entre las policías locales y los mossos, que ahora se desarrolla a través de la firma de 'convenios a medida en cada municipio', en palabras de un portavoz del Departamento catalán de Interior. El mismo portavoz afirmó que se trata de 'un ejercicio de la capacidad de autogobierno que tiene Cataluña, también en el ámbito de la seguridad ciudadana'.

Más de 50 ayuntamientos catalanes en los que ya están desplegados los Mossos d'Esquadra -en las provincias de Lleida, Girona y algunos municipios de Barcelona- han firmado estos convenios de colaboración que permiten a la Policía Municipal y a la autonómica distribuirse las funciones y coordinarse de la manera que crean más conveniente.

La fórmula varía en cada municipio en función de la realidad social, de las dificultades concretas y del número de efectivos. Los convenios convierten al alcalde en presidente de la Junta Local de Seguridad, pero no en el mando único sobre la policía, porque los mossos siguen bajo las órdenes de sus mandos y del consejero de Interior de la Generalitat, Xavier Pomés. En las poblaciones donde no está desplegada la policía autonómica, la junta local la copresiden el alcalde y el subdelegado del Gobierno.

Implicar a 15.000 agentes

En Cataluña hay ahora unos 8.000 agentes de la Policía Local y más de 7.400 mossos, la mitad de los efectivos que tendrá el cuerpo cuando finalice su despliegue, en 2010. Los efectivos reales del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil en Cataluña apenas superan los 9.000 agentes.

La implicación más decidida de las policías locales en la lucha contra la inseguridad ciudadana es una antigua reivindicación de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), que ha venido reclamando en los últimos meses la modificación de las leyes de Seguridad Ciudadana y de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El único avance en este sentido ha sido la creación de una comisión mixta con el Ministerio del Interior. El plan contra la inseguridad ciudadana presentado la semana pasada por el Gobierno no prevé ninguna de las dos reformas legales reclamadas.

Al margen del proyecto citado, la Generalitat prepara otra norma que regule la posibilidad de que las policías locales de Cataluña puedan acceder a algunos de los archivos de los Mossos d'Esquadra para compartir datos sobre delincuentes, en el ámbito español y del Tratado de Schengen. En Barcelona funciona, además, desde hace meses, una sala de coordinación policial en la que están representados la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía y los Mossos d'Esquadra.