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Mohamed VI impide a Driss Basri presentarse a las elecciones

La principal incógnita de las candidaturas a las elecciones legislativas marroquíes del 27 de septiembre quedó despejada ayer, 24 horas antes de que concluya el plazo para poder presentarse. Driss Basri, el que fue durante veinte años el brazo derecho de Hassan II, decidió no concurrir a los comicios, según indicaron fuentes de su entorno.

Basri, ex titular de Interior y de Comunicación, no obtuvo la luz verde del rey Mohamed VI para ser candidato independiente por la circunscripción de Settat, su ciudad natal, a la que se esforzó por desarrollar cuando estuvo en el poder, según indican otras fuentes marroquíes.

El nuevo rey le destituyó a los cuatro meses de su entronización, en julio de 1999, en un aparente intento de romper con la imagen de un pasado represivo, y ahora ha respondido con el silencio al permiso que le solicitó su ministro.

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El que fue hombre de confianza del padre del actual rey, hizo todos los trámites previos para poder presentarse, y dio incluso su primera entrevista, desde su destitución, en la que reveló que estaba sopesando ser candidato. 'La eventualidad de que el señor Basri se presente a las elecciones no está definitivamente decidida ni descartarda', declaró al semanario Tel Quel hablando siempre de sí mismo en tercera persona.

El hombre que fue el más poderoso de Marruecos, después del rey, tomó finalmente ayer la decisión de no competir por un escaño en su ciudad natal, cuyos habitantes, agradecidos, le hubiesen probablemente votado.

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Lo hizo, según su entorno, porque rechaza el nuevo sistema electoral que divide al pueblo marroquí -28 partidos se presentan a las legislativas- y gestará un Parlamento fragmentado. Marruecos necesita un Gobierno con una mayoría coherente, frente a una oposición homogénea, para poder lograr ser eficaz en su gestión y sacar adelante el país.

En el entorno del ex ministro se asegura además que éste nunca pidió al monarca su visto bueno para ser candidato, sino que, por cortesía y lealtad, se limitó a informar al palacio real de que estaba considerando hacerlo.

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