Minguella respalda la confesión del ex presidente Roig

El ex agente de futbolistas Josep Maria Minguella respaldó ayer la confesión realizada por Paco Roig, ex presidente del Valencia. Es decir, para evitar impuestos, el Valencia disfrazó el pago de 1,41 millones de euros del sueldo de Romario como si se tratase de una compra de tres jugadores de un modesto club brasileño de la Quinta División, el Ypiranga, que nunca llegaron a Mestalla.

Fue una fórmula 'pactada con el representante de Romario', según explicó Minguella. 'Son operaciones diáfanas', agregó; 'ese dinero no ha desaparecido. Otra cosa es si hubo o no fraude fiscal. También hay una discusión entre los clubes y Hacienda sobre los derechos de imagen de los jugadores'. De esa manera, Romario no pagaba impuestos en España y el Valencia se ahorraba practicar la retención del IRPF, el 47%, del dinero destinado al as brasileño.

Según la contabilidad del Valencia, el pago al Ypiranga se efectuó en agosto de 1997 a través de Bancaixa y fue a parar a un banco de Miami, el Republic Bank of New York, al que el club ha pedido ahora que le comunique a nombre de quién se envió ese dinero. Desde una ley de 1998, los delitos fiscales prescriben a los cuatro años, salvo que en ese tiempo se haya producido algún acto que interrumpa esa prescripción. Hacienda tiene abierta una investigación en los principales clubes españoles y el Valencia ha hipotecado parte de sus propiedades para hacer frente a la previsible multa.

Minguella, que ya está retirado del negocio de la representación de futbolistas, dijo que ésta era una práctica extendida en ese momento entre los clubes españoles. Y añadió que de estas operaciones estaba al corriente el actual consejero delegado del Valencia, Manuel Llorente, entonces gerente de la entidad: 'En las reuniones que tuvimos siempre hubo tres o cuatro personas del Valencia, una de ellas Llorente'.

Sin embargo, el club emitió ayer un comunicado en el que afirma que Llorente 'en ningún momento participó ni ideando ni pactando con Minguella el pago de ninguna cantidad a Romario de Souza'. 'Estas operaciones las ideó y pactó únicamente el señor Roig', añade la nota.

El ex presidente Roig también confesó el pasado domingo haber encubierto el pago del 15% al representante del centrocampista brasileño Marcelinho Carioca a través de otro fichaje ficticio: el del jugador Pablo Fortes, del Central Español, uruguayo, que acabó de carpintero en Alzira. Estos aparentes desembolsos por la contratación de Fortes salieron del Valencia el 29 de julio de 1997 (570.000 euros) y el 14 de enero de 1998 (580.000 euros).