'El título es fundamental para redondear una obra de arte'

La virgen de la lujuria, la película del cineasta mexicano Arturo Ripstein que se estrena hoy en España, fue presentada la semana pasada en la sección Contracorriente de la Mostra de Venecia. Ripstein (México, 1943) famoso, entre otras cosas, por su ya amplia filmografía, por haber colaborado con Luis Buñuel en El ángel exterminador y por haber hecho la versión cinematográfica de El coronel no tiene quien le escriba, basada en la novela homónima de García Márquez, parece muy satisfecho con esta decisión de la organización de la Mostra, y para explicar por qué recurre a una anécdota. 'Me encontré en el Lido al director Theo Angelopoulos y me preguntó en que sección se pasaba mi película. En la Contracorriente, le dije, y él me contestó: 'Por supuesto. Contracorriente siempre'. Lo primero que choca de su película es el título. 'Es cierto, es un título abiertamente contradictorio que me gusta mucho. El título es fundamental en una película y en cualquier obra de arte. Porque sirven para redondearla. Contribuyen a que sea perfecta', dice el director.

Es obvio que Ripstein se siente a gusto en esta historia oscura. Una adaptación sumamente libre de un cuento de Max Aub, que relata las relaciones sadomasoquistas de una prostituta muy especial (Ariadna Gil) y un camarero fetichista (Luis Felipe Tovar). Una historia que escandalizó lo justo en la Mostra, teniendo en cuenta que no compite por el León de Oro. Ripstein aclara, sin embargo, que él llegó a la película cuando el proceso de realización se había iniciado ya. 'Por eso, el guión se hizo de nuevo, dejamos muy poco del cuento de Max Aub. Todo es absolutamente inventado, pura ficción. Yo siempre quise llevarlo hasta la irrealidad total. Originalmente no se llamaba La virgen de la lujuria, pero es un título que nos gustó a todos y decidimos dejarlo. Los títulos son siempre un pequeño problema, tanto con las películas como con las obras de arte. Es importante encontrar uno bueno. A mí siempre me han interesado muchísimo los títulos. Recuerdo los títulos de los cuadros de Marcel Duchamps que siempre me fascinaban. Me gusta que la obra sea completa y la obra se redondea con el título. Aunque es un detalle que no interviene en el éxito, pero cierra la obra'.

Un regalo

En La virgen de la lujuria, Ariadna Gil es una prostituta española llamada Lola y todo gira en torno a este personaje y al camarero El Mikado del Café Ofelia, donde se sitúa la acción de la película. Ariadna, que en Venecia está presente por partida doble, con un papel menor en otra película de la sección oficial (Bear's kiss), se declara encantada de la experiencia con Ripstein. 'Hay películas interesantes, con personajes que una siente la necesidad de hacer, y luego hay algo que ocurre pocas veces, y es que te llega un verdadero regalo, como La virgen de la lujuria, dice'. El trabajo de dirección de Ripstein permite a los actores intervenir en la 'construcción' de los personajes, pero en este caso, la aportación llegó más lejos. 'Ariadna se escribió su papel', precisa el director. 'Nuestra Lola', añade Ripstein, 'es sólo víctima de su destino. Como el mesero. Es la primera mujer de destino que yo me topo en mi carrera que a su vez tiene un destino que no cumple. Claro que los destinos están ahí para que no lleguen nunca'. La presencia española en la película no se limita a la prostituta Lola, sino que incluye un grupo de anarquistas exiliados, uno de los cuales está interpretado por Juan Diego. El tratamiento un poco caricaturesco de estos anarquistas hará pensar probablemente en Buñuel. 'No sé por qué', responde secamente el director mexicano, 'Buñuel no hizo nunca una película de anarquistas'.

Ripstein dice que no puede vivir sin filmar y que está pensando ya en las próximas dos o tres películas, aunque no sabe aún sobre qué tema. 'Leí una entrevista de un director que decía: 'No comprendo a los que sólo hacen lo que quieren', pero a mí lo que me parece incomprensible es que hagan lo que no quieren'. ¿Cómo ve el cine mexicano actual? 'Tiene algunos nombres interesantes', responde lacónico. 'Digamos que el porcentaje de películas conseguidas es más alto que en otros países'.