Rato fija en el 2% el techo de las subidas para las tarifas eléctricas y telefónicas

El ministro de Economía, Rodrigo Rato, fijó ayer en el 2% el techo de las anunciadas subidas en las tarifas del teléfono y de la luz para los próximos años. La aclaración de Rato supone un jarro de agua fría para las grandes empresas eléctricas y las operadoras telefónicas, que aspiraban a que la revisión de tarifas tuviera en cuenta la inflación real en España (3,4%), y no el objetivo de inflación del Banco Central Europeo (BCE) para la zona euro, fijado en el 2%. El titular de Economía destacó que las subidas quedarán 'significativamente' por debajo del 2%.

El anuncio de Rato tuvo lugar ayer en una improvisada rueda de prensa previa a la presentación de la Comisión Especial para el Fomento de la Transparencia y la Seguridad en los Mercados Financieros y en las Sociedades Cotizadas, que se celebró ayer en la sede de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Con una sola frase, 'las tarifas de servicios públicos, como la electricidad y el teléfono, subirán significativamente por debajo del 2% el año próximo', Rato despejó las dudas introducidas por el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, el pasado lunes, cuando al anunciar una próxima subida de las tarifas telefónicas 'en promedio' por debajo de la inflación, olvidó detallar si esa inflación era la española o la europea del 2% como objetivo.

Laguna

Esa laguna, corregida también ayer por el propio Piqué, que confirmó subidas del teléfono del 2% como máximo, había desatado el nerviosismo en las operadoras telefónicas que, públicamente, solicitaron subidas acordes con la evolución de los precios en España y no con los objetivos de inflación europeos.

En el caso de las subidas de la luz no ha habido lugar a equívocos. Al anunciar en pleno mes de agosto que la luz subirá durante los próximos ocho años (hasta el año 2010), el Ministerio de Economía ya había dejado claro que el límite de las subidas de la electricidad sería del 2%, algo que tampoco ha sentado demasiado bien a las empresas del sector, que en el mes de julio habían expresado al Gobierno su voluntad de seguir negociando los aumentos de precios a la vuelta del verano.

Respecto al aumento de tarifas, Rato trató de calmar los ánimos de las asociaciones de consumidores y de los partidos de la oposición. El Gobierno, según dijo el ministro, sigue comprometido con que las tarifas de servicios básicos, como la electricidad y la telefonía, crezcan significativamente por debajo de los precios y, en cualquier caso, por debajo del objetivo de inflación fijado por el Banco Central Europeo (BCE). Insistió así en que durante los últimos años, el Ejecutivo ha llevado a cabo 'una política de liberalización y competencia' en sectores como el de telecomunicaciones y energético que 'han generado sustanciales reducciones del coste de estos servicios para los consumidores por primera vez en nuestra historia económica'.

De igual manera, Piqué precisó el alcance de las subidas telefónicas y dio a entender que el grueso de la subida afectará a las llamadas urbanas, las más habituales. 'Muchas de las tarifas continuarán bajando', dijo Piqué, 'las interurbanas e internacionales, no tanto como hasta ahora. Y otras tarifas puede ser que no bajen en términos nominales, pero sí en términos reales, es decir, no lo harán más allá de las tasas de inflación, como, por ejemplo, las tarifas urbanas. En conjunto, la factura del teléfono seguirá bajando, pero con menos intensidad', explicó.

Incumplimientos

Pero tanto las organizaciones de consumidores como el PSOE e IU critican que el Gobierno autorice ahora subidas de precios cuando se comprometió a lo contrario meses atrás. En el caso de las tarifas eléctricas, fue el propio Rato quien en 2000 se comprometió a bajar los precios hasta un 9% en tres años (sólo han bajado un 4% en el periodo), mientras que en el caso del teléfono, el sistema de precios máximos (price cap) que se va a modificar ahora garantizaba bajadas hasta el año próximo incluido.

Ayer mismo, la Asociación de Internautas (AI) acusó al nuevo ministro de Ciencia y Tecnología de romper 'de forma traumática con los compromisos electorales adquiridos en marzo del 2000' al permitir una subida de las tarifas telefónicas.

Para la Asociación de Internautas, esta iniciativa 'agrava la factura telefónica del conjunto de la ciudadanía', para que 'financiemos, una vez más, el fracaso que ha supuesto la liberalización de las telecomunicaciones en España, bajo la responsabilidad del Gobierno y de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones' (CMT).