El Consell toma cartas en la crisis de Opening y abre un expediente sancionador contra la empresa

El consejero de Industria y Comercio, Fernando Castelló, anunció ayer la apertura de un expediente sancionador contra Opening English School por el cierre de sus centros en la Comunidad y otras irregularidades detectadas. Una iniciativa que continúa en la línea iniciada en otras autonomías.

Castelló anunció ayer diversas acciones acordadas con las asociaciones valencianas de consumidores -Avacu, UCE y Tyrius -, que desde mediados de agosto están recibiendo un aluvión de protestas de los alumnos afectados por la crisis de la empresa. En la Comunidad hay 14 centros, seis de ellos franquiciados, y 9.200 alumnos afectados, el 80% de ellos con créditos suscritos para financiar sus cursos, según el consejero. Administración y asociaciones de consumidores han creado una comisión que se reunirá mañana y que intentará mediar una solución entre las partes. La comisión estudiará fórmulas, como la elaboración de una norma, que evite que estas situaciones se repitan, y analizará las ofertas de centros dispuestos a 'asumir' a los alumnos dependientes de la empresa matriz. La mayoría de las franquicias, explicaron, han mostrado su voluntad de seguir con las clases.

La secretaria general de la UCE en la Comunidad, Ana Zarzuela, recordó que parte de los alumnos 'desconocía que firmaba un crédito con la entidad financiera'. Y el presidente de Avacu, Ferando Móner, explicó que al daño económico se une el moral a alumnos que acudían a los cursos para mejorar su situación laboral. Unos y otros explicaron que la existencia de distintos contratos desaconseja recomendar de forma genérica si los alumnos deben o no seguir pagando los créditos. Castelló aconsejó que los afectados recurran a las asociaciones de consumidores y adelantó que la Consejería de Economía está dispuesta a mediar para recolocar a los profesores afectados.