Las comarcas del Pirineo piden que la Constitución europea reconozca la singularidad de los territorios de montaña

Las comarcas de montaña de Cataluña hicieron público ayer un manifiesto en el que reivindican la montaña como elemento diferenciado y piden que la futura Constitución europea establezca la singularidad de estos territorios. Los presidentes de los consejos comarcales de Alt Urgell, Alta Ribagorça, Berguedà, Cerdanya, Garrotxa, Pallars Jussà, Pallars Sobirà, Ripollès y Solsonès firmaron el manifiesto, en el que se reclama que la futura Constitución europea dé garantías de protección y apoyo a la singularidad y especificidad de estas zonas.

En el documento, que tiene carácter 'reivindicativo e identificatorio' de las comunidades y los territorios de montaña, los presidentes de los respectivos consejos reafirmaron su 'compromiso de acción constante y decidida en defensa de la calidad de vida, el progreso económico y el valor territorial del Pirineo'. En este sentido, añadieron que seguirán 'reivindicando e impulsando las iniciativas y profundizando en las oportunidades'.

En el marco del Año Internacional de las Montañas, como Naciones Unidas ha declarado este año 2002, el manifiesto señala algunos retos que conforman la realidad actual de las tierras de montaña: asegurar la radicación de la gente en el territorio; mantener la calidad de vida mediante el desarrollo de los servicios necesarios; evitar el repliegue de la agricultura; lograr el equilibrio entre las distintas actividades; un urbanismo adecuado a un medio muy frágil y una correcta gestión de los recursos naturales.

Entre las reivindicaciones planteadas, el escrito pone énfasis especial en el despliegue de la red tecnológica de comunicación para compensar el aislamiento y la baja competitividad de las actividades de montaña; el refuerzo de la organización escolar, clave en el mantenimiento de los jóvenes en estas zonas; la potenciación de los servicios sanitarios; la concilación del desarrollo y protección del territorio, y el mantenimiento y la renovación de la identidad y la cultura de montaña como síntesis de tradición y modernidad.

Los representantes de las comarcas de montaña de Cataluña advierten que 'sólo con un avance claro en estos aspectos será posible un incremento de las rentas, se consolidará la demografía y se mejorará el bienestar'.