'El BBV dio dinero a Carrero para Chávez'

Tanto los ex administradores como actuales gestores del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) han reconocido ante el juez Baltasar Garzón que el antiguo BBV hizo dos pagos en Venezuela, uno en 1998 y otro en 1999, para financiar al partido de Hugo Chávez.

Con todo, el BBVA no ha podido acreditar que los 1,5 millones de dólares pagados por un trust de Jersey a una sociedad de Curaçao llamada Concertina estaban destinados al Movimiento V República (MVR), el partido de Hugo Chávez. Lo máximo que ha precisado es que la sociedad Concertina pertenecía a un hombre muy próximo a Chávez llamado Tobías Carrero, quien tenía como socio a un ministro del Gobierno, Luis Miquilena.

El problema es que Chávez declaró por televisión que el BBVA no le sonaba para nada. El pasado miércoles, Luis Miquilena, el hombre que dirigiera las campañas electorales de Chávez, declaró a la cadena Globovisión que el BBV hizo dos pagos y que fue Tobías Barrero. 'Los recursos se obtuvieron a través de una empresa de Tobías Barrero y él tiene toda la relación de los gastos que se realizaron con esos recursos', dijo Miquilena, quien dijo que Chávez estuvo al corriente de las aportaciones.

Carrero es presidente de la compañía venezolana Multinacional de Seguros. Amigo de Chávez, es ahora, como Miquilena, su enemigo. Y estos días ha saltado a la primera página de los periódicos venezolanos por una historia política rocambolesca, a saber, las artes utilizadas por la oposición a Chávez para conseguir que el Tribunal Supremo rechazara el antejuicio contra los oficiales de las Fuerzas Armadas que dirigieron la revuelta frustrada de abril pasado.

Fue Tobías Carrero, según una grabación tomada en los teléfonos de Multinacional de Seguros, quien sugirió a Carmelo Lauría, dirigente opositor a Chávez, que era necesario hablar con una nueva magistrada del Tribunal Supremo para incrementar el número de votos a favor de la exculpación. 'Hay una de las magistradas que se ha incorporado, que ella fue la juez que divorció al presidente Lusinchi... Bueno, coño, un toquecito'. Carrero asegura: 'Está bien todo, pero eso es para aumentar'. Es decir: la exculpación estaba asegurada, pero se podía aumentar los votos.

Hasta ahora, la dificultad del BBVA para acreditar los pagos planteaba el peligro de que los pagos pudieran ser calificados como una apropiación indebida. Quedaría por ver si los pagos podrían ser un cohecho.

La ley venezolana prohíbe a las matrices de empresas extranjeras la aportación a las campañas.

El abogado Tulio Hermosilla, que ha presentado una querella criminal contra Chávez por estos pagos, cree, ahora, tener atrapado al presidente.