España según la ONU
En un informe presentado recientemente en Madrid, Gita Welh, asesora de Políticas de Desarro
llo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), dijo, entre otras cosas que 'España ocupa el tercer peor lugar de la UE en el índice de desarrollo humano', especificando que nuestro país ocupa el noveno puesto entre los países de la Comunidad Europea con más diferencia entre ricos y pobres.
De alguna forma, estas cifras no contradicen las reiteradas afirmaciones del ministro de Economía, don Rodrigo Rato, cuando dice que España ha crecido en su economía por encima de la mayoría de los países de la UE. Sólo difiere, y ahí nace la provocativa paradoja, en el reparto de la riqueza entre los distintos estamentos socioeconómicos de nuestra sociedad.
Y, así, mientras algunos privilegiados grupos económicos logran unos beneficios económicos de escándalo, otros sectores de la población tienen que hacer cotidianos equilibrios con el euro para llegar dignamente a fin de mes.
En suma, y en un comentario de 'andar por casa', que en este país la economía avanza con desenfreno en muchos casos mientras que los valores socio-laborales se devalúan por una prepotente política económica.
