El primer incendio forestal del verano arrasa una gran superficie de monte bajo en Cadalso

El primer incendio forestal importante del verano, iniciado de forma fortuita en el vertedero de Cadalso de los Vidrios a las 17.30 de ayer y que arrasó una gran superficie de monte bajo y zona forestal no arbolada, continuaba ardiendo a las dos de la madrugada de hoy. El fuerte viento racheado que sufrió la zona dificultó las labores de extinción y facilitó que las llamas alcanzaran el municipio de Almorox (Toledo), situado a ocho kilómetros de Cadalso. Unas 150 personas intentaban anoche apagar el fuego.

El incendio se extendió, a causa del viento, por tres frentes distintos. El primero, que afectó a la zona de la Comunidad de Madrid, pudo ser controlado con cierta facilidad. Los otros dos focos, en territorio toledano, se propagaron rápidamente, debido a la ausencia de caminos en la zona y a la abundancia de barranqueras, que dificultan la penetración de los vehículos antiincendios.

En la extinción participaron 15 dotaciones de los bomberos de la Comunidad, cuatro retenes de la Dirección de Medio Natural, un bulldozer para cavar cortafuegos, seis helicópteros del Gobierno regional y otro de Castilla-La Mancha, que fueron apoyados en el aire por dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente, según informó un portavoz de Emergencias 112.

El incendio arrasó zona forestal desarbolada. Se considera como tal aquella en la que los árboles no copan más del 20% del terreno. Se trataba sobre todo de monte bajo, como pastos y chaparros, y zona agrícola abandonada. El portavoz de Emergencias 112 adelantó anoche que, presumiblemente, las labores de extinción se prolongarían toda la noche, dada la dificultad de controlar las llamas.