Los hijos de gays y heterosexuales tienen el mismo desarrollo, según un estudio
El trabajo psicológico analiza 28 familias de Madrid y Andalucía
Las únicas diferencias entre los hijos de gays y lesbianas respecto a los criados por parejas heterosexuales son la mayor tolerancia que muestran los primeros hacia la orientación sexual, además de tener una visión menos estereotipada de los roles de género.
El retrato psicológico de menores con padres gays o lesbianas no difiere apenas del que presentan los críos educados en hogares heteroparentales. Ésta es la principal conclusión de un estudio de la Universidad de Sevilla, pionero en España, que analiza el desarrollo infantil y adolescente en hogares homoparentales después de estudiar una pequeña muestra de 28 familias.
María del Mar González, la investigadora responsable del estudio realizado por el departamento de Psicología Evolutiva de la Universidad de Sevilla y el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, destacó ayer que las conclusiones del trabajo concuerdan con las obtenidas en otras investigaciones similares realizadas en otros países. En la investigación se destaca que 'la orientación sexual de los progenitores, en sí misma no parece ser una variable relevante a la hora de determinar el modo en que se construye el desarrollo y ajuste psicológico de hijos e hijas'. Sobre los roles parentales de lesbianas y gays, el estudio sostiene que 'reúnen características personales que aportan, a priori, garantías de un buen desempeño en estas tareas'.
El informe también analiza el entorno social de las familias homoparentales, que describen como 'bastante integradas' en la sociedad y rodeadas de una red afectiva amplia a su alrededor. En cuanto a la vida cotidiana de los menores, la investigación ha comprobado que disponen de 'las dosis de estabilidad y de variedad que se requieren para propiciar un desarrollo sano y armónico'. No había apenas diferencias entre las rutinas de los hogares homoparentales y los restantes, según María del Mar González.
La investigación, promovida por la Consejería andaluza de Relaciones Institucionales y la Oficina del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, se efectuó entre 28 familias que residían en Madrid (15) y Andalucía (13) con una situación económica, en general, desahogada. La mitad eran monoparentales. Su tipología es también diversa: 15 eran lesbianas con hijos de uniones anteriores, 5 eran madres con hijos por inseminación artificial, 5 gays o lesbianas con hijos adoptados y 3 homosexuales que convivían casi a diario con sus hijos aunque no tenían su custodia.
En total se estudiaron 25 menores, de entre 3 y 16 años, que residían en estos hogares, pero también se evaluaron compañeros de su centro educativo seleccionados al azar y alumnos del mismo nivel que compartieran el tipo de familia (monoparental, biparental o reconstituida después de una separación) para comparar los tres grupos. Para llegar a las conclusiones finales, los psicólogos analizaron las actividades cotidianas de los menores,su nivel académico o la aceptación por sus compañeros de clase, entre otros parámetros.
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