El jefe del Ejército argelino reconoce que el islamismo sigue intacto
El terrorismo está vencido pero el sustrato del integrismo islámico 'sigue intacto y continúa fabricando terroristas'. El jefe del Estado Mayor argelino, el general Mohamed Lamari, rompió su silencio el martes pasado ante un grupo de periodistas locales que asistieron a una ceremonia en la Academia Militar Interarmas de Cherchell.
Lamari hizo especial hincapié en que no existía ese 'gobierno en la sombra' de los militares argelinos que tutelaría a los civiles. 'Les recuerdo', prosiguió, 'las palabras del presidente de la República [Abdelaziz Buteflika] quien dijo que el jefe del Estado Mayor se había enterado de la formación del nuevo Gabinete como cualquier otro ciudadano'. 'No son palabras demagógicas'. 'Es la realidad'.
'Si en el pasado ocurrió que el Ejército Nacional Popular se inmiscuyó en los problemas políticos de nuestro país, fue porque en aquel momento las instituciones del Estado flaqueaban', añadió Lamari, según la agencia de prensa argelina (APS). 'Intentamos apuntalar aquello y, gracias a Dios, la República fue salvada y sus instituciones salvaguardadas'.
Hoy día 'el Ejército sólo desempeña la misión que le asigna la Constitución, ni más ni menos', concluyó Lamari. 'Es verdad que participamos en la lucha contra el terrorismo y eso lo haremos hasta el final' aunque, precisó, sólo siguen activos unos 700 elementos violentos en lugar de los 27.000 que empuñaban las armas a mediados de la pasada década.
Las palabras del general sobre la derrota de los terroristas resultan sorprendentes cuando en el primer semestre del año han muerto violentamente 730 personas, según la prensa de Argel, y que desde hace cuatro semanas los islamistas armados están intentando golpear la capital y sus subburbios, hasta ahora poco atacados.
