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Condena de cárcel firme para un periodista ruso

El periodista militar ruso Grigori Paskó, privado de su grado de capitán de fragata, seguirá pudriéndose en la cárcel. El Tribunal Supremo rechazó ayer la apelación de Paskó, quien fue condenado en diciembre pasado a cuatro años de prisión por espionaje. Su delito es haber denunciado los vertidos radiactivos que hacía la Flota del Pacífico directamente en el océano.

Paskó fue detenido por primera vez en noviembre de 1997, a su regreso de un viaje al Japón y después de que al salir de Rusia se le hubiera confiscado en el aeropuerto de Vladivostok un paquete de documentos. El Servicio Federal Seguridad (FSB) le acusó entonces de espiar a favor de Japón y le encarceló. En el verano de 1999 el tribunal de Vladivostok lo condenó a tres años de prisión 'por abuso en el desempeño de sus funciones', pero no por espía, y pudo salir en libertad. La fiscalía militar apeló la sentencia y un nuevo proceso terminó en una nueva condena.

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