Crece la oposición a que la Iglesia anglicana venda su colección de Zurbarán

La oposición a que la Iglesia anglicana venda su colección de cuadros de Zurbarán ha aumentado de manera significativa en las últimas semanas. La Iglesia ha admitido unas pérdidas de 80 millones de libras (unos 125 millones de euros) por la caída de sus acciones en la compañía Vodafone, aumentando así la presión para poner en práctica la operación de venta de los Zurbarán. La venta fue acordada por la Junta de Gobernadores de la curia anglicana en otoño pasado (véase EL PAÍS de 21 de septiembre último), aunque sin llegar a poner ni fecha ni precio.

Se trata de 13 lienzos de la serie Jacob y sus hijos, de los que todos menos uno están considerados originales de Zurbarán y están expuestos en el comedor de la residencia del obispo de Durham, en el castillo de Auckland, al norte de Inglaterra. Cuentan las malas lenguas que los cuadros llegaron a Inglaterra en 1754 a través de unos piratas y que fueron adquiridos por el obispo de entonces por el equivalente a 30.000 pesetas. Valorados ahora en no menos de 16 millones de euros, los ingleses temen que su salida al mercado facilite también su salida del país con destino a España, al Museo del Prado quizás.

Simon Jenkins, de The Times, calificó hace unos días de 'sacrilegio' la iniciativa y recomendó a sus jerarcas que pongan orden en su cartera de valores en lugar de 'vender la plata de la familia'. El obispo de Durham, el reverendo Michael Turnbull, se opone desde siempre a la venta porque cree que esas tierras son ya 'el verdadero hogar' de las pinturas.

El diario The Guardian citaba ayer otras voces contrarias a la operación. A juicio de Paul Handley, director de la revista Church Times, los administradores de las finanzas eclesiásticas deberían contemplar otras posibilidades para remediar la crisis económica, como la venta de algunas de sus numerosas propiedades inmobiliarias. Algunos jerarcas ya se han puesto manos a la obra. El obispo de Portsmouth, el reverendo Kenneth Stevenson, anunció hace unos días que va a vender el enorme palacio episcopal.