Once heridos en un nuevo choque de dos trenes en el corredor mediterráneo
- Un convoy de pasajeros y otro de mercancías colisionan en la estación de L'Hospitalet de l'Infant - El Gobierno catalán y los alcaldes de las poblaciones costeras piden a Renfe más inversiones
Apenas dos meses después del choque de trenes en la estación de Torredembarra, en el que hubo 2 muertos y 141 heridos, de nuevo un tren Catalunya Express y otro de mercancías se han encontrado en la misma vía y han chocado, esta vez en la estación de L'Hospitalet de l'Infant. En esta ocasión los maquinistas han podido reaccionar a tiempo y evitar una catástrofe mayor porque los trenes viajaban a escasa velocidad. El accidente se saldó con 11 heridos leves.
Felip Puig: 'La línea no reúne las condiciones óptimas de seguridad'
Minutos antes de las ocho de la mañana, un tren Catalunya Express que salía desde la vía principal de la estación de L'Hospitalet de l'Infant chocó lateralmente con un tren de mercancías que entraba en la vía 5. El Catalunya Express, procedente de Barcelona, salía de la estación en dirección a Tortosa con 50 pasajeros a bordo, mientras que el tren de mercancías realizaba el trayecto Valencia-Cerbère y transportaba 12 vagones con productos siderúrgicos.
El choque originó el descarrilamiento de dos vagones del tren regional. Once pasajeros resultaron heridos leves, otros sufrieron contusiones y todos un terrible susto. Cuatro de ellos fueron trasladados al hospital Sant Joan de Reus. Todos fueron dados de alta ayer. A causa del accidente, el tráfico ferroviario en la línea Barcelona-Tortosa quedó interrumpido.
Operarios de la compañía, con un tren taller especializado en reparaciones y una grúa de 100 metros, retiraron el tren regional y repararon las 200 traviesas y los 100 metros de vía afectados por el accidente, cuyas causas se desconocen. Renfe ha abierto una investigación para determinarlas. Los responsables de la compañía que se desplazaron al lugar no quisieron analizar el accidente. Tampoco se pronunciaron sobre si se debió a un error mecánico o humano.
El siniestro ha reabierto la polémica sobre la seguridad del corredor mediterráneo y la necesidad de mejorar las líneas ferroviarias. El consejero de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalitat, Felip Puig, puso en duda ayer las condiciones de seguridad, señalización y visibilidad de este corredor y aseguró que reclamará a Renfe y al Ministerio de Fomento que se destinen los recursos y la inversión necesarios para garantizar la seguridad. Puig agregó que esta línea 'no reúne las condiciones óptimas de seguridad y no recibe la atención prioritaria que debería por parte de Renfe y de Fomento', y recordó que en un plazo muy corto de tiempo se han producido dos accidentes del mismo tipo, en maniobras de entrada y salida a las estaciones, informa Dulce Valero.
El delegado de la Generalitat en Tarragona, César Puig, aseguró ayer que la Generalitat solicitará a Renfe toda la información sobre este nuevo accidente y exigirá que se definan responsabilidades. También reclamará que se aceleren las obras de construcción de la doble vía por la costa, una petición en la que han insistido repetidamente los alcaldes de los municipios del litoral.
El alcalde de L'Hospitalet de l'Infant, Josep Castellnou, insistió ayer en la urgencia de construir una segunda vía para absorber 'el intenso tráfico ferroviario de la zona'. Por ese corredor pasan trenes regionales, de mercancías y el Euromed, que circula a velocidad alta.
El PSC anunció ayer que el grupo socialista solicitará la comparecencia urgente del presidente de Renfe, Miguel Corsini, en el Congreso de los Diputados. La diputada del PSC por Tarragona, Carme Miralles, aseguró que el choque de ayer 'tiene muchos puntos en común con el de Torredembarra ya que la colisión lateral se produjo al invadir los dos trenes una misma vía'. Por este motivo, Miralles considera que este incidente pone en cuestión tanto el sistema de seguridad como el diseño de la línea Barcelona-Valencia.
El consejero Puig cree también imprescindible que la línea se desdoble para obtener dos vías de anchura convencional y dos de anchura internacional por la que puedan circular trenes de alta velocidad, los Euromed y trenes de largo recorrido. A juicio de Puig, 'hay una clara desatención por parte de Renfe a las tierras del Ebro', como demuestra el hecho, añadió el consejero, 'de que se haya cerrado hace pocos días la estación de Ulldecona o que el Euromed no pare en la estación de la Aldea'.
El pasajero que vivió dos choques
El accidente provocó ayer las quejas de los pasajeros del tren regional siniestrado, que acusaron a Renfe de desatención. 'Aquí no ha venido nadie de la compañía, no se nos ha preguntado qué necesitamos, y ningún responsable ha venido a informarnos', decía, indignado, Jaume Sebastià Audi, uno de los pasajeros del Catalunya Express. La suya era una indignación con doble fundamento: Jaume Sebastià viajaba también en el tren regional que el 30 de marzo colisionó contra un Euromed en la estación de Torredembarra. El accidente fue muy parecido, aunque el de ayer fue de mucha menor intensidad. En aquella ocasión, el Catalunya Express, que debía esperar en una vía secundaria, invadió la vía principal, por la que circulaba un Euromed con 600 pasajeros a 155 kilómetros por hora. La investigación oficial de Renfe culpa del accidente al maquinista y al interventor del tren regional. Murieron 2 personas y otras 141 resultaron heridas. Ayer, pues, llovía sobre mojado. Los pasajeros que utilizan regularmente la línea expresaban su temor por la falta de seguridad. Las quejas se extendían también ayer al trato recibido después del accidente. Renfe había anunciado a través de una nota informativa la contratación de autocares y medios alternativos de transporte para realizar transbordos por carretera entre las estaciones de Cambrils y L'Ametlla de Mar y entre Tarragona y L'Aldea para garantizar la movilidad de los pasajeros. Pese al anuncio, algunos usuarios aseguraron a este diario que Renfe no garantizó este transporte por carretera.
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