Las bolsas cierran su peor semana desde septiembre y se sitúan en mínimos anuales

La Bolsa cayó ayer con fuerza arrastrada otra vez por los grandes valores españoles con intereses en Latinoamérica. El Ibex 35 perdió en esta sesión el 1,28% y el 5,90% en la semana, que es la peor desde los acontecimientos de septiembre de 2001.

La Bolsa española cerró ayer la peor semana desde los ataques terroristas del 11 de septiembre, con un descenso del 5,90% en el Ibex 35 y del 4,79% en el índice general de Madrid. Para los inversores españoles llueve sobre mojado, ya que la causa de esta nueva caída tiene un referente muy importante en el contagio a Brasil de la crisis argentina, lo que provocó fuertes descensos en los grandes valores españoles con intereses en la zona.

La depreciación del real brasileño y las rápidas intervenciones en el mercado de divisas por parte del Banco de Brasil pusieron en guardia a los inversores españoles, que todavía no conocen la cuenta final de la crisis argentina en los resultados de las grandes empresas españolas sólo por la depreciación del peso.

La caída del Ibex 35 en esta última sesión fue del 1,28%, con lo que acumula un descenso del 10,92% en el total del ejercicio. El índice general acumula el 5,94% tras caer ayer el 0,96%. El resto de las bolsas europeas también tuvo una sesión complicada, con recortes que se acercaron al 2%. París bajó el 1,90%, Francfort el 1,27% y Londres el 0,75%. Las tres también tienen pérdidas anuales (5,95%, París; 4,32%, Francfort, y 3,34%, Londres).

En conjunto, la actual trayectoria de los mercados de valores tiene causas muy diferentes, entre las que ocupan un lugar principal las numerosas irregularidades de gestión descubiertas en Estados Unidos, que han llevado la incertidumbre a aquel mercado. Los inversores estadounidenses temen la aparición de nuevos casos de corrupción, pero también se hace constante referencia en aquel mercado a la situación en Oriente Medio.

Ayer se conoció el índice de paro de mayo en EE UU, que bajó dos décimas, hasta el 5,8%.Sin embargo, el índice Dow Jones de valores industriales de la Bolsa de Nueva York llegaba a caer en algunos momentos más del 1,5% en esta sesión, hasta los 9.472 puntos, 130 puntos por debajo del nivel que tenía el 10 de septiembre de 2001. Cerró con una bajada del 0,36%.

A primera vista, da la sensación de que el efecto de los atentados del 11 de septiembre y lo peor de la crisis se ha borrado de la memoria de los inversores, junto con los esfuerzos que llevaron al Dow Jones a recuperar el nivel de los 10.600 puntos el pasado mes de marzo. Desde entonces, la Bolsa de Nueva York ha bajado más del 10% como consecuencia de la acumulación de sonados escándalos financieros, algún caso de corrupción y desconfianza respecto de la buena intención de los analistas, algo que hace creer a los inversores de este lado del Atlántico que el sistema financiero estadounidense hace agua por todas partes.

La capacidad de arrastre del mercado estadounidense explica buena parte de las reacciones negativas en Europa, aunque aquí los inversores tienen motivos más que sobrados para ser prudentes debido a la rebaja de las previsiones de crecimiento económico que hizo recientemente la CE para el segundo trimestre.