Un decorado de cartón piedra para la Alianza
Un Berlusconi exultante califica de 'éxito de Italia' la cumbre de Roma
Silvio Berlusconi, el primer ministro italiano, confesó que la jornada de ayer será ya 'uno de los recuerdos más bellos' de su vida. El líder de Forza Italia no paró de sonreír y abrazar a todo el mundo. Era su gran día. Como anfitrión de los grandes líderes mundiales, él mismo supervisó todos los detalles. Incluso eligió el menú con manjares sólo con los colores de la bandera italiana: rojo, blanco y verde. Calificó la cumbre de 'un éxito de Italia' y se mostró especialmente orgulloso del edificio de cartón piedra que decoradores y artistas italianos han fabricado en 20 días en la base aérea de Pratica di Mare para la firma del acuerdo OTAN-Rusia.
'Hemos construido esta sede a la altura del acontecimiento que celebramos. Desgraciadamente, mañana desaparecerá', comentó con pena a todos sus homólogos. El edificio prefabricado, herméticamente cerrado, con una sola puerta de acceso, tiene incluso grandes ventanas falsas pintadas de azul. En su interior se colocó la elegante mesa redonda de madera a la que se sentaron los 20 líderes. Puesto a echar el resto, Berlusconi ordenó trasladar allí 20 históricas estatuas y esculturas procedentes de museos de Roma y Nápoles para realzar la foto de familia.
Cuando recibía a los dirigentes a la puerta del edificio, a Berlusconi se le veía feliz. Especialmente cariñoso, abrazos y besos incluidos, se mostró con Vladímir Putin y José María Aznar. El discurso ante sus 19 acompañantes fue de un tono tan exultante que les provocó varias veces la risa; sobre todo cuando recordó los orígenes de Roma y citó a Rómulo y Rémolo (sic) o cuando llamó al secretario general de la OTAN 'Robinson' en lugar de Robertson, error que ya cometió hace dos semanas en Reikiavik. Hasta el tiempo jugó a su favor. Tras una tormenta nocturna que afectó a varios edificios de Roma, la jornada fue soleada y luminosa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.