_
_
_
_
_

Chirac refuerza su poder y afianza a la derecha ante las generales

El nuevo Gobierno de Francia cuenta con un ministro procesado

A sus tradicionales ocupaciones de política exterior y del control del arma nuclear, el presidente francés, Jacques Chirac, sumó ayer el mando personal sobre el Consejo de Seguridad Interior, un organismo coordinado hasta ahora por el primer ministro. El jefe del Estado mantiene la iniciativa tras su reelección, el 5 de mayo, y lo considera el mejor aval para triunfar en las legislativas de junio.

Más información
Electoralismo de urgencia del nuevo Gobierno francés
La izquierda francesa intenta pactar candidaturas únicas en las legislativas
Chirac nombra un Gobierno con políticos de confianza y dirigentes de la sociedad civil
El 'trauma' de Le Pen domina la campaña electoral en Francia
Dossier:: Presidenciales 2002 en Francia
Participación:: La opinión de los lectores

Según una la encuesta que publica hoy el semanario Le Point, la derecha ganará con el 53% de los votos. El sondeo, realizado por la empresa Ipsos, avanza este escenario para la segunda vuelta de las legislativas, frente a una primera vuelta en que la derecha obtendría el 41%, y el Frente Nacional, de Jean-Marie Le Pen, un 12%. La izquierda (socialistas, comunistas y Los Verdes) se quedaría en el 39%, y la extrema izquierda, en el 3%. El Polo Republicano, de Jean-Pierre Chevènement, que competirá en solitario al haber fracasado las conversaciones con los socialistas, recibirá un 3%.

La batalla contra la inseguridad se presenta como un excelente banderín de enganche. Atacar el problema fue la máxima promesa electoral de Chirac y el Gobierno decidió ayer potenciar el órgano coordinador de la seguridad, que ya existía -fue creado por Michel Rocard en 1988 y reactivado en 1997 por Lionel Jospin-, pero cuya clave reside en la implicación del presidente. Los ministros de Interior, Justicia, Defensa, Economía, Presupuesto y Ultramar formarán parte del organismo, además del jefe del Gobierno.

La criminalidad global en Francia sigue siendo comparable a la de 1993 y 1994: 68,8 delitos por cada 1.000 habitantes, según datos del Ministerio del Interior. Pero la delincuencia aumentó el año pasado, tras unos años de estabilidad e incluso de cifras a la baja. Un total de 187.650 robos y 25.096 agresiones contra personas pueden ser pocos o muchos, según el punto de partida. El caso es que los robos aumentaron en 2001 un 8%, y las agresiones, casi un 10%, siempre sobre el año precedente. Como consecuencia de la psicosis, las prisiones están superpobladas. Un total de 54.113 personas se encontraban encarceladas el 1 de mayo (6.276 más que el 1 de enero). El nuevo Consejo de Seguridad Interior no sólo tomará medidas, sino que controlará la adecuación de los medios disponibles al objetivo de 'impunidad cero'. Con el foco puesto intensamente sobre la seguridad, la ética política pasa a un segundo plano. El nuevo Gobierno de Jean-Pierre Raffarin cuenta con un ministro procesado, que conserva el cargo 'en nombre del principio de presunción de inocencia', según puntualizó ayer el portavoz del Ejecutivo. Se trata de Renaud Donnedieu de Vabres, encargado de Asuntos Europeos, procesado desde 1998 por 'blanqueo e infracción a la ley sobre financiación de partidos políticos' en un sumario por financiación irregular del ex Partido Republicano. A partir de 1992, todo ministro procesado dimitió de su cargo, una tradición que se ha roto bruscamente.

Mientras tanto, el auténtico hombre de confianza de Chirac, que no es otro que Alain Juppé -primer ministro de 1995 a 1997- le organiza desde las bambalinas el partido unido de la derecha, al que sólo se resiste ya el líder del partido centrista UDF, François Bayrou.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_