La Subdelegación del Gobierno prohíbe las marchas de protesta contra el centro de reforma de menores de Oria

La concentración celebrada ayer en la plaza del Ayuntamiento por los vecinos de Oria (Almería) que están en contra de la ubicación en su pueblo de un Centro de Reeducación de menores será la última. El subdelegado del Gobierno en Almería, Fernando Hermoso, ha prohibido a la plataforma de vecinos del municipio realizar más concentraciones en protesta por la apertura del centro.

La medida, tomada para 'prevenir' incidencias, coincide con la declaraciones realizadas por el defensor del pueblo andaluz, José Chamizo, en las que juzgó como 'excesivo' el número de menores infractores internados en el centro de Oria.

En declaraciones a los periodistas previas a su intervención en unas jornadas sobre voluntariado social celebradas en Sevilla, Chamizo consideró 'lamentables' los actos violentos ocurridos en la localidad como el incendio intencionado en el despacho del alcalde, el socialista José Pérez, si bien calificó de 'probablemente excesivo' el número de menores que puedan recluirse en las instalaciones.

Mientras tanto, la Subdelegación del Gobierno prohíbe nuevas concentraciones basándose en la 'tensión social existente' y en el temor a que puedan producirse 'alteraciones de la normalidad ciudadana'. El centro, que comenzó a funcionar hace unas semanas con 15 internos, tiene capacidad para 45 menores que podrían ingresar de manera progresiva en los próximos meses. A juicio de Chamizo, la solución a los enfrentamientos entre el sector de la población en contra de la apertura del centro y la Administración es 'sentarse y hablar'.

El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que ayer se encontraba en Almería, salió al paso de las manifestaciones de Chamizo sobre el número de internos que podría albergar el centro de menores, haciendo un símil con el incendio provocado en el despacho del alcalde. 'Siempre hay gentes que echan la gasolina y después siempre viene alguien que provoca la chispa y provoca también el incendio. Es un símil, pero yo creo que algo de eso ha ocurrido cuando hemos asistido durante mucho tiempo a un calentamiento de determinados sectores en contra del centro de menores', dijo. El presidente aseguró que los pasos dados para poner el funcionamiento el centro han sido 'absolutamente escrupulosos', con todas las garantías de seguridad y con la posibilidad de crear puestos de trabajo.

El presidente mostró su repulsa y rechazo por el 'atentado' del pasado miércoles y recordó las 'obligaciones' del Ejecutivo andaluz con la ciudadanía. 'La sociedad andaluza tiene la obligación y la responsabilidad de rehabilitar a sus menores. Si todos los ayuntamientos se opusieran estaríamos faltando a esa responsabilidad. No va a haber ningún problema porque la seguridad está garantizada y no se puede hacer una utilización partidaria del centro'.