La Inspección abre diligencias sobre el fiscal que interrogó a Nevenka Fernández

El jefe de la Inspección Fiscal, Juan José Martínez Zato, abrió ayer unas diligencias informativas al fiscal jefe de Castilla y León, José Luis García Ancos, para aclarar los términos en los que se produjo el interrogatorio a la ex concejal Nevenka Fernández en el juicio por acoso sexual contra el alcalde de Ponferrrada, Ismael Álvarez. El fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, ha dado su visto bueno. García Ancos manifestó que está 'totalmente satisfecho' con su actuación, y comentó: '¿Sustituirme a mí del cargo? ¡Faltaría más, por esta memez y bobadas!'.

El decreto del jefe de la Inspección señala que las diligencias al fiscal jefe García Ancos se abren ante la forma de interrogar a la testigo, 'hasta el punto de merecer no ya el reproche y la consternación de los familiares de la víctima, sino incluso el reproche del Presidente del Tribunal, que tuvo que recordarle que estaba interrogando a una testigo y no a un acusado'.

La investigación se justifica, según el decreto, 'por si lo anteriormente relatado es merecedor de algún tipo de reproche'. No obstante, las explicaciones del fiscal jefe se recabarán cuando termine la vista del caso Nevenka, para no interferir en la marcha del juicio.

A las diligencias se incorporarán las cintas de vídeo y audio que se puedan localizar por la fiscalía, así como las denuncias y testimonios de colectivos ciudadanos que han expresado su indignación por el tono del interrogatorio.

Según fuentes de la Fiscalía, al término de la investigación el fiscal Inspector, Martínez Zato, tendrá que elevar al fiscal del Estado una de estas dos propuestas: o el archivo de las diligencias o la apertura de un expediente disciplinario al fiscal jefe del Tribunal Superior de Castilla y León. Si eventualmente se abriese el expediente, la Inspección tendrá que deducir en ese momento qué tipo de falta podría haber cometido el expedientado.

'Totalmente satisfecho'

El fiscal jefe de Castilla y León, José Luis García Ancos, dio ayer su propia versión sobre el porqué le han abierto diligencias tras el interrogatorio al que sometió a Nevenka Fernández. 'A la fiscalía han llegado una serie de escritos de asociaciones de señoras de éstas y... explícame que está pasando en ese juicio, y es lo que explicaré. Aquí no va nadie contra nadie. Estoy totalmente satisfecho de mi actuación'.

García Ancos insistió ayer en que el proceso de la apertura de diligencias se está desarrollando 'inadecuadamente, con él y con el fiscal general del Estado'.

Al preguntarle sobre si podría ser sustituido del caso, respondió: '¿Sustituirme a mi del cargo? ¡Faltaría más, por esta memez y bobadas'.

Respecto a la cascada de críticas y denuncias públicas de colectivos sobre la actuación del fiscal con Nevenka Fernández, éste dijo: 'Que me pongan lo que quieran, están en su perfecto derecho'.

'Cuando termine el juicio, luego explicaré, daré pelos y señales, pero voy a continuar el juicio tranquilo', matizó.

El abogado de la joven, Adolfo Barreda calificó ayer de 'incoherente' la calificación del fiscal sobre el caso. 'Lo más coherente con sus manifestaciones y los prejuicios que ha llevado al juicio es que no hubiera acusado, además de la narración de los hechos que hace en su calificación no se desprende acoso sexual, a pesar de lo cual dice que hubo acoso sexual'.

Rosario Velasco, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Ponferrada, uno de los testigos que acudió ayer a la Sala, reveló la actitud 'despectiva' y el tratamiento 'inadecuado' dado por el alcalde a Nevenka Fernández en plenos y comisiones.

Según sus declaraciones, Nevenka mantuvo una reunión con ella en la que observó que la ex concejal en su última etapa en el ayuntamiento sufría un grave 'hostigamiento'. Su aspecto era el de 'una piltrafa humana'. 'Yo la aconsejé que viera a un médico urgentemente', agregó. Así lo hizo Fernández, y al acudir a una psiquíatra de Madrid, de la Seguridad Social, le habló del acoso sexual padecido.

El primer teniente de alcalde, Carlos López, y la concejal María Gutiérrez, del equipo de gobierno del alcalde procesado, coincidieron ayer en su testimonio en que no sabían nada de que Nevenka Fernández lo hubiera pasado tan mal. A juicio de ambos, la joven siempre estaba alegre y contenta.