Repertorio superior
La música, en sus más variopintos estilos, es un elemento activo en la vida universitaria del País Vasco
La universidad no cuenta entre sus características la de mantener una relación muy fluida con la música, aunque forma parte de las Bellas Artes, carrera incluida en su oferta de titulaciones. De hecho, en el País Vasco los estudios superiores de música se imparten en centros independientes de los campus al uso. Por ello, la tuna y el gaudeamus igitur pueden parecer los únicos vínculos que atan a una y a otra. Nada más lejos de la realidad.
Pese a su escasa presencia en el campo académico, la música sí tiene un papel, y de cierta relevancia, en el área de las actividades que organizan o que acogen las universidades vascas fuera de las aulas y del horario lectivo.
Tanto en la Universidad del País Vasco (UPV) como en la Universidad de Deusto las notas y los compases están presentes en numerosas y variadas formas, interpretaciones y estilos, con dos objetivos básicos, tal y como indica el vicerrector de Extensión Cultural de la UPV, Leonardo Lorente.
'Por un lado, nos interesa el aspecto lúdico de la música y, por otro, aunque ambos están relacionados, el formativo', declara.
Así lo cree la directora del Círculo de Actualidad Gaurgiro de la Universidad de Deusto, organizador de actividades culturales en la institución educativa vizcaína, la profesora Marta Zubia. 'Es fundamental porque desarrolla la educación de la estética, de la sensibilidad, algo básico en la educación integral de una persona', subraya.
Por ello, es notable la cantidad de iniciativas relacionadas con la música que se desarrollan en ambas universidades. En los tres campus de la universidad pública se suceden a lo largo del año académico conciertos en los que se ofrece a la comunidad universitaria una muestra de las múltiples tendencias musicales actuales, desde el flamenco hasta el rock vasco pasando por el pop, el folk u otros estilos.
Del mismo modo, se colabora con distintas instituciones públicas y privadas en la organización de recitales fuera de la universidad a los que los alumnos pueden acudir de manera gratuita con invitación.
A ello hay que sumar las actividades de carácter más didáctico, como los conciertos explicativos de música clásica que se ofrecen en la Facultad de Ciencias del campus de Leioa, o las aulas de música presentes en los tres campus, en las que se imparte desde percusión hasta biodanza.
En un plano diferente se halla el coro de la UPV, que este curso cumple 25 años. Aunque compuesto por miembros de la comunidad universitaria,en su mayoría alumnos y ex alumnos, su papel está más cercano a la representación y divulgación de la universidad y de la música vasca.
Con una finalidad similar, el curso que viene nacerá un grupo de música de cámara compuesto por intérpretes que compaginan su actividad musical con los estudios en la UPV.
Precisamente, la música clásica es la protagonista de los ciclos de conciertos de jóvenes valores que organiza desde hace nueve años con notable éxito la Universidad de Deusto.
Los participantes en estos ciclos, futuros profesionales de la música clásica, son en su mayoría ajenos a la universidad. No ocurre lo mismo con las Jornadas de Música, en las que grupos y cantautores que estudian en la universidad de Deusto tienen la oportunidad de actuar, en muchos casos por primera vez, ante el público.
Tampoco falta el coro en la institución educativa vizcaína. Formado hace cuatro años, tiene como peculiaridad que en él participan tanto alumnos de la universidad como estudiantes extranjeros llegados a través de programas de intercambio, un modo más de demostrar el valor de la música como lenguaje universal. Y de la universidad.
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