Los cajeros automáticos informarán de la comisión que cobran antes de cada operación

Los usuarios de tarjetas están de enhorabuena. La ministra de Sanidad y Consumo, Celia Villalobos, avanzó ayer que su departamento tendrá listo, en un plazo de mes y medio, una orden ministerial para obligar a los bancos y cajas de ahorros a que informen en las pantallas de los cajeros automáticos sobre la comisión que se cobra antes de que el cliente realice cada operación. Este ministerio actuará en colaboración con Economía. Fuentes bancarias han criticado la medida porque consideran que supone facilitar datos comerciales a entidades competidoras y que es compleja tecnológicamente.

Celia Villalobos adelantó en los pasillos del Senado su respuesta a una interpelación que le formuló en el pleno de la Cámara el grupo de la Entesa Catalana de Progrés. Este grupo parlamentario instó al Gobierno a defender a los consumidores y usuarios y a garantizar la transparencia y la información veraz de los bancos y cajas de ahorros mediante medidas de ese tipo.

Según explicó la ministra, con la nueva normativa en la pantalla del cajero deberá informarse al usuario de que la operación que va a realizar no tiene comisión o, en caso contrario, del coste de la misma, antes de que el ciudadano la acepte, por lo que la decisión de seguir adelante será del usuario.

Según fuentes del Ministerio de Sanidad y Consumo, esta medida se tramitará por una orden ministerial 'que estará lista en el plazo de un mes o como máximo dos meses'. Esta orden ministerial recogerá la propuesta de ley que el Partido Popular presentó en el Congreso. La razón por la que se realiza el trámite a través de una orden ministerial 'es que es más rápida su puesta en marcha', según Sanidad y Consumo.

Adaptación tecnológica

Una vez que la orden esté aprobada, se concederá un plazo para que las entidades financieras se adapten. El Ministerio reconoce que esta implantación exigirá un tiempo determinado 'porque la tecnología de los cajeros y todo el parque de tarjetas, que son 45 millones de unidades, deberán ser adaptadas a las nuevas condiciones'.

El texto legal contará con los términos recogidos por el ministerio de Economía. Este departamento contó con un informe realizado por el Banco de España sobre la actuación de los bancos y cajas, así como los tres sistemas de tarjetas que existen en España: Servired, 4B y Euro 6000, propiedad de las cajas.

Villalobos aprovechó la ocasión para aconsejar a los ciudadanos que 'se lean lo que firman', porque cuando se recibe una tarjeta bancaria se firma un contrato en el que se especifican las comisiones que se cobran en los diferentes cajeros.

En su iniciativa, Entesa Catalana de Progrés exigía precisamente que en las pantallas de los cajeros aparecieran las comisiones, ya que el precio de cada comisión varía según la entidad financiera, el servicio prestado, el tipo de tarjeta, la red utilizada y la localidad desde donde se realiza la extracción del dinero. Entesa pedía que se respete el derecho del ciudadano a 'una información veraz'.

Villalobos resaltó que 'el Gobierno ha hecho avances muy importantes en lo que significa la transparencia en el conocimiento por parte de los usuarios de los bancos de las relaciones que tienen con éstos en lo que se refiere a comisiones'.

El sector financiero se resiste a este cambio. Diferentes ejecutivos consultados explicaron ayer que esta medida 'supone informar de la política comercial que cada entidad tiene con todos sus clientes. Esa información es importante y no debe ser aireada'.

Este argumento se fundamenta en que los clientes de una misma entidad pueden tener comisiones diferentes según el grado de vinculación con el banco o caja con el que trabaje. Para un cliente de una entidad puede ser gratis sacar metálico de un cajero y para otro de esa misma entidad que acuda a continuación, la operación puede tener un coste.

Por esta razón, cada tarjeta debe tener inscrita información suficiente para que, según todas las variables que se puedan dar, figure la comisión exacta que se va a cobrar.

El sector se lamenta de las nuevas inversiones que esta medida supondrá, después de las correspondientes a la adaptación al euro. Sin duda los ejecutivos del sector también están pensado en la posible reducción de ingresos que puede suponer esta medida. En 2001 el Banco de España realizó un informe en el que destacaba que las comisiones de bancos y cajas habían crecido un 11% gracias, en parte, a que estaban cobrando servicios que antes eran gratuitos.

En los últimos cuatro años los ingresos por comisiones han crecido un 46% en el sector financiero, hasta alcanzar los 7.212 millones de euros. Concretamente, las tarifas sobre tarjetas de crédito subieron en 2000 un 16%. Entre los grandes bancos el que más incremento registra es el BBVA, donde las comisiones de tarjetas se elevaron un 57% en 2001 respecto al año anterior. En el Banco Popular crecieron un 16,9% y en el Santander Central Hispano un 4,42%.

El año pasado Servired fichó a nuevas entidades con lo que fortaleció la red. Entre las nuevas entidades están Caja Madrid, La Caixa, Caja España y Bancaja. Como reacción a este movimiento, Euro 6000 y 4B acordaron rebajar sus tarifas. Desde el 1 de julio pasado, los clientes de estos dos sistemas pagan una comisión máxima de 0,5 euros (83 pesetas) por extraer dinero de cualquier cajero automático de ambas redes. La cuantía definitiva de esta comisión la fijará cada entidad, con lo que es posible que alguna decida no cobrar nada por esta operación. Los clientes de las dos redes pagan actualmente una media de 333 pesetas cuando acuden a otra red.

El presidente de Euro 6000, Javier Egaña, y el director general de 4B, Alfonso de la Viuda, destacaron la buena acogida que el acuerdo está teniendo entre sus clientes. Ambas entidades prevén un descenso de los ingresos, aunque también un recorte del gasto. Asimismo reducirán la tasa que se cobran las cajas o bancos por realiazar este servicio entre ellos. De las 225 pesetas anteriores se pasó a 75 pesetas.

La Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc) expresó ayer su satisfacción por este anuncio. Según señaló a Servimedia un portavoz de Ausbanc, la medida les parece muy acertada porque supone un avance para los clientes.