5.000 personas pierden su casa en Yenín
El comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados palestinos (UNRWA), Peter Hansen, declaró ayer que Israel ha utilizado una 'fuerza desproporcionada' en su ataque contra el campamento de Yenín, donde destruyó las casas de unos 5.000 palestinos. Hansen manifestó que la ofensiva israelí en Cisjordania ha causado una enorme destrucción y ha creado nuevas necesidades que van a minar los ya de por sí mermados recursos de UNRWA.
Según los recuentos iniciales, indicó Hansen, unas 800 viviendas han sido destruidas y muchas más dañadas en el campo de refugiados de Yenín, dejando sin casa a un número de personas que oscila entre las 4.000 y las 5.000. 'En casi todos los campos, especialmente en Yenín y en ciudades como Nablús, la destrucción ha sido enorme. Hay un gran trabajo de limpieza y reconstrucción por delante'.
El Gobierno israelí sostiene que sus fuerzas combatieron casa por casa en el campo de Yenín y que tuvieron que bombardear o derribar toda una zona en la que los milicianos palestinos ofrecían resistencia.
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