El Tribunal Superior de Baleares lleva el caso del ministro Matas al Supremo
Ordena que el 'caso Formentera' sea enviado al alto tribunal por si procede imputar al ministro
El Tribunal Superior de Justicia de Baleares decidió ayer 'ordenar' al juez Antonio Monserrat, que decretó el archivo del 'caso Formentera' -supuesto delito electoral relacionado con votos por correo de emigrantes en Argentina-, que remita al Tribunal Supremo 'los indicios existentes para la imputación de Jaume Matas, [ex presidente del Gobierno balear y actual ministro de Medio Ambiente], y Rosa Estarás [ex consejera autonómica de Matas y actual diputada del PP en el Congreso]'. El ex presidente balear afirmó ayer que esa decisión no altera en nada el caso.
El Supremo desestimó meses atrás, a instancias del fiscal general del Estado, una querella de PSOE e IU contra Matas y Estarás, con el argumento de que existía una indagación judicial en marcha en Baleares. Ahora, de nuevo, la Sala Segunda del alto tribunal decidirá si cita a los dos aforados para saber si delinquieron. Tras la 'práctica de numerosas diligencias (...) para avanzar en la investigación, es necesario recibir declaraciones de estas personas', afirma el Tribunal Superior de Baleares.
'Los indicios aportados por el Fiscal [de Baleares] son, en definitiva, plausibles', dictamina la sala del tribunal balear, que asume en gran parte las tesis acusatorias refrendadas por 28 de los 30 fiscales de la comunidad autónoma y las acusaciones que representan al PSOE, IU y PSM. La sala arguye que 'es claro que, a nivel indiciario, el delito de malversación puede existir' y que 'no puede descartarse terminantemente la existencia' de un delito electoral.
El caso Formentera se centra en la supuesta manipulación de 74 votantes emigrantes en Argentina, de los que 72 votaron en las últimas elecciones autonómicas a una lista local vinculada al PP, y sobre la posible utilización de fondos públicos para captar esos votos.
Los cuatro jueces de la sala de lo Penal y Civil del Tribunal Superior de Baleares revocan y rectifican el auto del instructor, Antonio Montserrat -que parecía un 'auto defensor', según el escrito del fiscal Antonio de Vicente-Tutor- y valoran las alegaciones expuestas por la fiscalía y las acusaciones ejercidas por tres partidos de izquierda.
El magistrado ponente, Antonio Capó; el presidente del TSJB, Angel Reigosa, y los jueces Javier Muñoz y Miquel Masot, requieren en su auto al instructor del caso Formentera para que traslade al Supremo una exposición razonada 'cuyo contenido será el exactamente pretendido por el Ministerio Fiscal y los otros apelantes, consignando el razonamiento jurídico' de la resolución del Tribunal Superior de Baleares.
'Esto no varía nada'
Jaume Matas, que se encontraba ayer en La Vila Joiosa (Alicante), restó importancia al acuerdo del Tribunal Superior de Justicia de Baleares. 'Esta decisión judicial no varía esencialmente en nada este caso. Por lo tanto, tranquilidad', declaró, según informa Ezequiel Moltó. El ministro asumió la decisión judicial con este planteamiento: 'Hay que celebrar que las instancias judiciales puedan actuar cuanto antes, ya que estamos interesados en que esto se resuelva y se elimine cualquier sombra de duda sobre mi gestión'. Y añadió que no piensa abandonar el cargo.
Los portavoces regionales del PP aseguraron que 'Matas no está bajo sospecha', y atribuyeron al Gobierno de Baleares una obsesión por la 'eliminación y destrucción del adversario'. Por su parte, el presidente del Ejecutivo balear, Francesc Antich (PSOE), manifestó que 'el PP ha de aclarar un caso con indicios claros de corrupción', y reclamó al presidente del Gobierno, José María Aznar, que practique la doctrina que en su día pregonó sobre las responsabilidades políticas. Antich preguntó a Matas: '¿Quién es el que debe pedir disculpas por este caso, y cuándo?'.
IU y PSOE expresaron su moderada satisfacción por la decisión judicial, que va 'en la senda' de lo que ellos reclaman: que se investigue, y que Matas declare. La izquierda criticó al juez instructor Antonio Monserrat, un abogado que trabajó para el PP y que mantuvo 'una relación amplia profesional y de amistad con Matas', según los portavoces del PS0E e IU, Damià Cánoves y Miquel Roselló. Monserrat fue elegido magistrado del TSJB con los votos de la izquierda y del PP, a propuesta de éste partido. 'Lo recurrimos como juez, y no se dignó a contestar la recusación. Hoy no le votaríamos', explicaron esos representantes de IU y del PSOE. El Partido Socialista de Mallorca opinó que 'los indicios de delito [en la actuación de Matas] son impresionantes'.
El Tribunal Superior señala que el auto de archivo del caso 'no es nulo', porque está motivado, y que 'no se le puede negar la valoración amplia' para 'una decisión tan capital'. Pero los cuatro jueces lo enmiendan 'porque no pueden descartar, terminantemente, que los hechos investigados sean constitutivos de delito'.
El Tribunal cuestiona el concepto de 'arraigo' en la inscripción de 74 votantes en la isla de Formentera, y la coincidencia con que se registraron: los emigrantes son naturales de otras islas, de Ibiza, de Llubí, de Santa Margarita y de Barcelona. 'La cuestión probablemente más importante' que contraviene el arragio, señala el auto, radica en 24 residentes ausentes que consiguieron mudar su lugar de votación a última hora, cuando ya se habían convocado las elecciones, extremo que contraviene gravemente la normativa electoral. Esos electores de última hora procedían de Palma, Ibiza, Mahón, Pollença, Barcelona, Santa Margarita y Sant Antoni.
Formentera, cuyo único diputado suele ser decisivo en la formación de mayorías en la comunidad y en el consejo insular, fue supuestamente objetivo de un plan electoral del Gobierno de Matas, con participación de Rosa Estarás, entre otros.
