El padre de las intifadas

Marwan Barguti, de 41 años, profesor de Lengua y Literatura Árabe en la Universidad de Bir Zeit y padre de cuatro hijos, ha sido el líder de todas las intifadas. Barguti estaba en una calle de Ramala en diciembre de 1987 cuando estalló la primera revuelta de las piedras y era un simple dirigente de Shabiba, el brazo juvenil del gubernamental Al Fatah. Su protagonismo en aquella lucha le consagró como dirigente indiscutible en Cisjordania, le propició el odio del Ejército israelí y motivó su detención y expulsión de los territorios, obligándole a marcharse a Túnez, de donde regresó en 1994, amparado por los acuerdos de Oslo.

Volvió del exilio con la cabeza muy alta, sin haberse contaminado de la corrupción que azotaba a la OLP. Recuperó el liderazgo de las juventudes de Al Fatah, la dirección del partido en Cisjordania, e incluso fue elegido diputado por el Consejo Legislativo Palestino en los comicios de 1996. Su actitud crítica frente a la Autoridad Palestina y su permanente contacto con los ciudadanos de a pie en Ramala, su ciudad natal, volvió a colocarle en primera línea, en la calle, cuando en septiembre de 2000 estalló la segunda Intifada y fue investido generalísimo de un ejército inexistente, los Tanzim.