La Junta asegura a los mineros de Boliden que su plan de recolocaciones estará listo a finales de abril

La Consejería de Empleo y Desarrollo Tecnológico está a punto de finalizar su plan de recolocaciones para los trabajadores de las minas de Aznalcóllar, abandonadas por la empresa Boliden Apirsa, que no tengan acceso a las jubilaciones anticipadas. Responsables de la Consejería indicaron ayer a representantes de los mineros que en la segunda quincena de abril harán públicos los nombres de las empresas interesadas para que comiencen las negociaciones con los trabajadores afectados. 'Es una noticia bastante positiva', indicó Guillermo Macías, portavoz de los mineros.

El representante de los mineros, que el sábado abandonaron su encierro en la catedral de Sevilla para reclamar respuestas a las Administraciones, explicó que las negociaciones comenzarán una vez que se conozcan las empresas y el calendariO de instalación en la comarca. Macías recordó el compromiso de la Junta en propiciar la creación de 'empleo estable e indefinido' sobre todo en el municipio de Aznalcóllar (Sevilla) muy afectado por la marcha de la empresa minera, desbordada por los costes a los que hizo frente tras el vertido tóxico en el Guadiamar, en abril de 1998.

La Consejería de Empleo ha aprobado subvenciones de 6.000 euros para las empresas que hagan contrato a los mineros de Aznalcóllar y prevé adquirir suelo de las instalaciones de la empresa (en suspensión de pagos) para crear un parque industrial en el municipio, aunque esta operación está pendiente aún de que el Gobierno central levante el embargo sobre estos terrenos por deudas incobradas a Boliden Apirsa.

Los trabajadores esperan que sólo un centenar de los 415 empleados de plantilla tendrá que buscar un nuevo empleo. El objetivo de los mineros es que más de 300 de ellos puedan acceder a un plan de jubilaciones anticipadas al que aportarán sus indemnizaciones (240 millones de euros); para ello, sería necesario que el Ministerio de Economía y el Ministerio de Trabajo aprobaran la aplicación de unos coeficientes reductores, similares a los que se utilizan en la minería del carbón (fundamentalmente en Asturias y Castilla-León), para rebajar la edad de jubilación al límite de los 50 años. Técnicos de ambos ministerios se reunieron en la tarde de ayer en Madrid para ultimar este plan, según la Delegación del Gobierno central en Andalucía, que al cierre de esta edición no pudo informar del resultado de este encuentro.

En conferencia de prensa celebrada también ayer en Sevilla, el secretario general de CC OO, José María Fidalgo, y el responsable del sindicato en Andalucía, Julio Ruiz, aseguraron que la aplicación de esos coeficientes 'sólo depende de la voluntad política' del Gobierno central y no de cuestiones técnicas o jurídicas.

Fidalgo explicó que la aplicación de esos coeficientes era un compromiso del delegado del Gobierno central, José Torres Hurtado, con los mineros. Los representantes de CC OO indicaron que si no había una solución 'se generará más presión social y nuevas movilizaciones.

Encierro en la catedral

El delegado del Gobierno central, en una declaraciones realizadas por la mañana, confirmó la reunión entre los Ministerios para acelerar el plan de jubilaciones anticipadas. De hecho, Torres Hurtado aseguró que fue el envío de una carta suya a los trabajadores enviada el pasado viernes, en la que informaba de este encuentro, lo que facilitó la salida de los trabajadores de la catedral de Sevilla, tras un encierro de once días.

Los trabajadores, sin embargo, rechazaron que la carta de Torres Hurtado les convenciera para abandonar el encierro Macías insistió en que esa decisión se tomo por 'respeto a la Semana Santa, a la opinión pública y a la ciudadanía de Sevilla'. El portavoz de los mineros reiteró que la decisión de abandonar el encierro 'se tomó de manera libre'. 'Menos aún bajo presión del Gobierno, que ya nos ha engañado bastante', explicó.