Europa: el fantasma gitano

Carta abierta a la presidencia española de la Unión Europea:

Hay por lo menos dos razones por las que la presidencia española de la UE es especialmente importante para muchos millones de gitanos que viven en el continente: la comunidad gitana de España es la más numerosa en el ámbito de la UE, y la presidencia española tendrá que vérselas de forma especial con los problemas relacionados con la ampliación hacia el Este.

La nación gitana en Europa parece un fantasma que vuela, sin haber sido invitado, sobre el larguísimo proceso que ha llevado al euro y a la institución de la Convención, por hablar sólo de los últimos y tímidos hacia nuevos órdenes institucionales soñados a lo largo de décadas.

Los millones de gitanos que viven desde siempre en Europa forman minorías en cada uno de los países en los que viven y de los que son ciudadanos; pero si el proyecto político de los estadistas se hubiese hecho realidad en el transcurso de más de medio siglo, los gitanos no serían una minoría, o lo serían en igual medida que los 85 millones de alemanes.

Los gitanos reivindican una representación como nación que no quiere ser un Estado, en un ámbito, el europeo, en el que la tradicional,y trágica, voluntad de hacer coincidir el concepto de Estado con el de nación ya no es adecuada para los intereses de todos los europeos.

En los Balcanes, como en toda Europa, la fuerte presencia de los gitanos no encuentra representación, y se les excluye, casi sistemáticamente, de las mesas de diálogo que se crean a raíz de los conflictos. Los gitanos son un fantasma no invitado, y sin embargo, son parte del mapa étnico de Europa. Tienen su lengua, su identidad, su historia, su cultura y su conciencia de pertenecer a una comunidad más amplia. En resumen, son una de las naciones europeas. Pero no tienen un Estado al que referirse, y tampoco aspiran a tenerlo. Y en un mundo de Estados nacionales esto parece equivaler a un pasaporte al infierno, una justificación permanente ofrecida a todo el que quiera olvidar o borrar la existencia de los gitanos, igual que sus derechos civiles y humanos.

Con algunas excepciones, los gobiernos europeos ignoraron en gran medida a los gitanos cuando, después de la caída del comunismo, se volvieron a trazar las fronteras y se establecieron nuevos órdenes políticos. Ahora es el momento de corregir este error en su propio contexto, es decir, la entidad política en la que esperan poder entrar todos los países balcánicos de Europa: la Unión Europea.

La propuesta política de la International Romani Union (Unión Gitana Internacional) es clara y sencilla: mientras todos los Estados europeos, incluidos los balcánicos, aspiran a entrar en la UE, hay que dejar de lado la multitud de negociaciones para el acceso de cada país a la Unión, y garantizar hoy a los gitanos europeos, a esta nación europea sin Estado, la condición de ciudadanos de la Unión Europea, un pasaporte europeo para representar la identidad europea de los gitanos, de los únicos que son 'sólo europeos'. Ha llegado la hora de tomar decisiones valientes y oportunas, es tiempo de garantizar a los individuos gitanos una protección eficaz, es precisamente el momento de proponer un calendario: el de la asociación y adhesión de los distintos países balcánicos a la UE. Porque nada, excepto unas instituciones supranacionales reformadas, puede garantizar el 'Estado de derecho' a individuos pertenecientes a una nación transestatal.

La Unión Gitana Internacional propone, por lo tanto, dos trayectorias paralelas:

- La ciudadanía europea directa para los gitanos como primer paso concreto en el camino hacia la asociación progresiva y más tarde adhesión de los países balcánicos a la UE.

- Un calendario propuesto a todos y cada uno de los Estados balcánicos, una agenda que prevea los distintos pasos que deben darse en plazos reales, cumplidos con las necesarias condiciones para su puesta en práctica.

Precisamente 'los únicos sólo europeos' pueden contribuir a una nueva Europa.

Los autores son, respectivamente, el presidente y el comisario de Asuntos Exteriores de la Unión Gitana Internacional.