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Reportaje:

Economistas con narices

La peña Verema organiza estos días en Valencia un encuentro para los aficionados al vino habituales de su página 'web'

Apreciar un vino es cuestión de práctica. Las buenas narices también se educan. Como demuestra la formación que inició hace doce años de forma autodidacta, y como excusa para disfrutar del vino, un grupo de amigos que trabajaba, y en su mayoría aún lo hace, en la Facultad de Económicas de Valencia y que ahora comparten con mucha más gente.

El grupo, denominado Verema, supo introducir en su tiempo libre el aroma del vino a través de la fría globalidad de Internet y creó una página web (www.verema.com) que en enero registró 163.000 páginas visitadas y 11.000 navegantes de España e Iberoamérica. La experiencia virtual se inició hace unos años, cuando, según explica José Contreras, uno de los miembros de la peña, un grupo de ellos decidió 'trasladar su conocimiento de diez años en una web'. Conocimiento acumulado por las sesiones de cata ciega (que impiden ver cualquier identificación de la botella) que desde la creación de la peña realizan una vez al mes. Se quedaron 'un poco sorprendidos' por la audiciencia que tiene la página. Tanta, que Verema ha organizado en Valencia su primer encuentro físico, que deja atrás el anonimato de la red para que los nombres se conviertan en caras. Y en narices.

El primer encuentro Verema se inicia esta tarde en Valencia y se alargará hasta mañana sábado. En el foro participan once enólogos españoles (dos de ellos de Alicante) elegidos por democrático orden de votación entre los más demandados por los internautas. La cita contará con mesas-coloquio sobre la evolución de la viticultura en España y las tendencias de la enología. Las catas, tras cada sesión teórica, se centratrán en vinos elaborados por los enólogos invitados al encuentro. En conjunto la experiencia, que pretende ser 'intimista' y que huye de la masificación, contará con la presencia de unas 70 personas de todo el país.

El encuentro, al igual que la página web de Verema, no es exclusivista. La filosofía es integrar y dar cabida a las opiniones, sugerencias y peticiones de todos aquellos que tengan algún interés en el mundo del vino, ya sean aficionados, consumidores, restauradores o distribuidores. 'El vino es una parte muy importante del acto de disfrutar una buena comida', comenta Contreras. Por eso, Verema pretende dar cabida a todos los sectores involucrados en los distintos pasos de este disfrute.

La interactividad que han recibido desde que lanzaron de forma experimental su foro de debate dentro de la página virtual ha animado a estos aficionados al vino a plantear nuevas secciones participativas. Como la de caldos catados, creada 'para democratizar las opiniones sobre vinos' y en la que cualquier persona puede opinar sobre un caldo. La sección nació con unas 200 referencias y en un mes ha recibido más de un centenar de nuevas aportaciones. La respuesta hace prever a sus organizadores que en un plazo máximo de un año y medio la base de datos contendrá información sobre más de 2.000 vinos catados y comentados por una o varias personas.

Y mientras plantean nuevas secciones interactivas, Verema continuará realizando sesiones de Cata ciega, 'lo más humilde que hay' porque es la única forma 'de no estar condicionado por el precio del vino ni por la Denominación de Origen', explica José Contreras.

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