Dimiten la alcaldesa de Urnieta y su 'número dos' por el fiasco de la 'telefónica' municipal

La alcaldesa de Urnieta, Maixa Lizeaga, y su teniente de alcalde, Juan Luis San Miguel, ambos del PNV, presentaron ayer su dimisión en el pleno del Ayuntamiento al reconocer su fracaso en la gestión de Urnietatel, la operadora de telefonía local. El consistorio, gobernado con mayoría absoluta por PNV-EA, puso a la venta en mayo pasado el 70% de las acciones de la compañía municipal por 7,5 millones de euros, pero el impago de los compradores frustró la privatización. La oposición considera que ha habido irregularidades en esta gestión.

Urnietatel fue presentada en abril de 1998 por el entonces regidor de Urnieta, José Ignacio Lizeaga (senador del PNV hasta hace escasas fechas y hermano de la alcaldesa), como un ambicioso proyecto de telecomunicaciones que iba a proporcionar servicios de telefonía e Internet muy ventajosos a todos los vecinos de la localidad. La empresa, constituida inicialmente con capital municipal, tenía previsto un plan de expansión a los municipios de la comarca de Donostialdea. Urnietatel ofrece gratis las llamadas locales y la televisión por cable, y la conexión a Internet a casi seis euros mensuales.

Sin embargo, la fuerte inversión que supuso instalar toda la red de cable y las pérdidas de explotación acumuladas llevaron al Ayuntamiento a plantear la privatización de la compañía. En abril de 2000, siendo ya Maixa Lizeaga alcaldesa, se puso a la venta el 70% del capital de Urnietatel, que fue adquirido por Miguel Ángel Fernández Sánchez por 7,5 millones de euros (1.250 millones de pesetas), aunque sólo abonó 600.000 euros antes de fallecer a los tres meses de la compra. El 30% restante se lo reservó el Ayuntamiento a través de la sociedad pública Urnieta Eraiki, también presidida por Maixa Lizeaga.

En junio de 2001 surge un segundo comprador, el promotor inmobiliario Iñaki Unsain, quien asume las deudas contraídas por el primero a cambio de su paquete de acciones de Urnietatel, según consta en las actas del consejo de administración de Urnieta Eraiki, a las que tienen acceso los partidos de la oposición. El PNV-EA cuenta con siete concejales, Batasuna tiene tres, el PSE-EE, dos y el PP, uno.

En esta segunda compraventa, los nuevos socios pagaron 1,2 millones de euros y acordaron con Urnieta Eraiki abonar otrs 3,75 millones de euros antes del 31 de diciembre de 2001. De no hacerlo, la titularidad íntegra de Urnietatel revertiría al Ayuntamiento. Y así ocurrió. Unsain no pudo cumplir con los abonos comprometidos y, al igual que el primer comprador, perdió la cantidad económica invertida.

El último día del año pasado, Urnieta Eraiki comunicó a sus consejeros que un tercer comprador, CAC Telecom, iba a hacerse cargo de la operación, pero ésta no llegó a prosperar.

Los partidos de la oposición han criticado a la alcaldesa por la 'opacidad' de todas las gestiones relacionadas con Urnietatel, y han expresado su extrañeza por la 'incongruencia' que supone la inversión de cantidades millonarias por parte de los empresarios sin recibir a cambio contraprestación alguna. Ninguna de las transacciones se han inscrito en el Registro Mercantil por lo que, legalmente, Urnietatel ha estado en todo momento en manos del Ayuntamiento. Sin embargo, Maixa Lizeaga, durante su brevísima intervención en el pleno para justificar su dimisión, reconoció ayer que Urnietatel 'puso a la venta el 70% de las acciones'. Dio a entender que la privatización era necesaria para hacer posible la 'expansión' de la compañía de telefonía. En su discurso admitió que esta operación 'ha fallado', aunque quiso tranquilizar a la ciudadanía afirmando que 'todos los servicios que ofrece Urnietatel se van a mantener' a costa del presupuesto municipal. Junto a Maixa Lizeaga también dejó ayer su cargo el primer teniente de alcalde, Juan Luis San Miguel. Ambos han figurado en todo momento como miembros de los consejos de administración de Urnietatel y Urnieta Eraiki.

La vacante dejada por Maixa Leizeaga en la alcaldía será cubierta por el concejal peneuvista Florentino Ugalde. El ex alcalde de Urnieta en las dos primeras legislaturas, José Manuel Martiarena, posteriormente viceconsejero de Interior y actual senador de designación autonómica por el PNV, podría asumir desde la sombra la misión de reconducir la crisis abierta.