Un adolescente de 15 años internado en un centro de menores, acusado de violar a nueve chicas

Un adolescente de Barcelona que en la actualidad tiene 17 años es el presunto autor de al menos nueve violaciones cometidas durante los últimos 15 meses. D. P. G., que desde hace 13 meses está internado en un centro de menores por agresiones sexuales, supuestamente aprovechó los permisos de fin de semana para violar y robar a nueve chicas de las que al menos cuatro eran menores de edad. Según la policía, el chico cometió las primeras violaciones cuando tenía 15 años y continuó delinquiendo mientras cumplía la sanción en el centro de menores.

El Departamento de Justicia de la Generalitat, responsable del centro, salió al paso de las afirmaciones de la policía argumentando que 'los permisos de fin de semana a menores los concede el juez, nunca la Administración'. Según Justicia, el menor no tuvo ningún permiso entre su ingreso en el centro, el 2 de diciembre de 2000, y el pasado 2 de diciembre, y tampoco consta ninguna fuga. En cambio, sí salió de permiso uno de cada dos fines de semana desde el pasado diciembre hasta la actualidad.

En opinión de Justicia, la policía ha cometido 'un error' al atribuir violaciones al joven mientras este se encontraba encerrado en el centro de menores. La investigación del caso se está realizando con gran cautela, ya que tanto las víctimas como el acusado son menores de edad. Por ello la Fiscalía de Menores, que tiene la tutela del joven, ordenó a la policía que suspendiera una rueda de prensa prevista para ayer con objeto de dar más detalles sobre la operación.

Sí trascendió que el menor actuaba principalmente en el centro de Barcelona y que localizaba a sus víctimas mientras éstas caminaban por la calle. En varios casos, el violador las obligaba a entrar en escaleras y, tras hacerlas subir a los pisos superiores, las violaba en el rellano. Consumado el acto sexual, D. P. G. aprovechaba por robarles dinero y objetos personales que llevaban encima.

El hallazgo de varios objetos de las víctimas entre las pertenencias del menor permitió a la policía identificarle como presunto violador. El joven no ha tenido que ser detenido, puesto que ya se encuentra privado de libertad en el centro de menores.

Fuentes del Departamento de Justicia informaron ayer de que 'todas las salidas de D. P. G. están documentadas y responden a lo que dictó el juez en su momento'. De esta forma, según fuentes oficiales, el joven salió del centro en tres o cuatro ocasiones desde principios de diciembre, 'siempre bajo tutela de sus familiares'.

El presunto violador tiene un abultado historial delictivo. Su ingreso en el centro de menores, en diciembre de 2000, ya fue motivado por al menos un delito contra la libertad sexual. En aquel momento el joven acababa de cumplir 15 años. El juez ordenó su ingreso en un centro de menores. La medida consistía en un año de privación de libertad en régimen cerrado y medio año más en régimen semiabierto.

La primera parte de la medida finalizó el pasado mes de diciembre y actualmente se encuentra cumpliendo la segunda parte, a la espera de la nueva resolución del juez. Sin embargo, a la vista de los últimos acontecimientos, ya ha sido sonmetido de nuevo al régimen cerrado. Esto significará que no podrá disfrutar de los permisos de fin de semana que tenía cada quince días.

El Departamento de Justicia quiso atajar ayer una nueva polémica sobre el control que ejerce sobre los centros de menores asegurando que el caso del presunto adolescente violador 'es una excepción sin precedentes'. De hecho, argumentó, en 2001 el Departamento de Justicia asumió a 2.356 menores a quienes se habían dictado medidas judiciales.

En numerosas ocasiones, los educadores y responsables de los centros de acogida de menores han criticado la falta de voluntad del Departamento de Justicia para mejorar las instalaciones y garantizar la seguridad de los centros. FEDAIA, la federación que agrupa a la mayor parte de las entidades dedicadas a la acogida de menores, denunció el año pasado que la Generalitat sólo paga el 50% del coste real de las plazas que tiene concertadas en estos centros. Según los responsables de esta entidad, algunos de los centros privados tendrán que cerrar sus puertas si no reciben más subvenciones.