Nacionalistas y socialistas logran cerrar en Guipúzcoa un nuevo acuerdo presupuestario

La Diputación de Guipúzcoa dispondrá este año de un presupuesto de gasto propio cifrado en unos 515,6 millones de euros (85.800 millones de pesetas), tras el acuerdo firmado ayer con solemnidad en el Palacio Foral de San Sebastián entre representantes del PNV, EA y PSE-EE. El pacto permitirá sustituir el presupuesto que hace dos años sellaron los nacionalistas moderados con HB, que fue prorrogado el pasado ejercicio.

Este cambio significativo, que se orienta a la recuperación de la cultura de pactos entre nacionalistas y socialistas interrumpida por el Acuerdo de Lizarra, fue destacado ayer por los dirigentes de ambas formaciones. El diputado general, Román Sudupe, mencionó la importancia de lograr 'espacios de entendimiento' que 'van a rebajar la tensión y la crispación que tantas veces se observa en la política'. El líder de los socialistas guipuzcoanos, Manuel Huertas, calificó el acuerdo como 'una gran noticia', en contraste con la 'desconfianza' que crea el 'desacuerdo' que actualmente preside la vida institucional vasca.

El pacto firmado ayer, que cierra los acuerdos presupuestarios en las diputaciones, tras la aprobación de las cuentas ya en Álava, gracias a un acuerdo entre PP y PSE y Vizcaya, también con pacto entre nacionalistas y socialistas, ha costado dos meses de negociaciones. Aunque estaba prácticamente cerrado desde diciembre, ha debido esperar a tener la conformidad de las ejecutivas nacionales de los tres partidos, arrastradas por la tensión creada a raíz del bloqueo de los presupuestos del Gobierno autónomo.

Sudupe y Huertas subrayaron, en sus comparecencias por separado, que el compromiso presentado no va más allá de la aprobación de las cuentas guipuzcoanas y descartaron la posibilidad de extenderlo a un pacto de legislatura que requeriría un acuerdo 'más profundo referido a temas que desbordan las partidas presupuestarias y el ámbito de la Diputación', dijo Sudupe. Ambas partes se negaron a detallar las cifras concretas del acuerdo hasta que lo presenten en las Juntas Generales esta misma semana.

El reforzamiento de la política social es uno de los pilares del compromiso. Entre otras medidas, la Diputación destinará una partida inicial de poco más de tres millones de euros (500 millones de pesetas) para complementar prestaciones asistenciales.

La construcción de carreteras y su financiación es otro de los puntos clave. En los próximos años se ampliará a tres carriles la A-8 en diferentes puntos, además del desdoblamiento de la N-I entre Gaintxurizketa y Ventas de Irún, y se encargarán los proyectos de las variantes de Orio, Zarautz y Zumaia y la tercera fase de la de Eibar.

Batasuna se pronunciará hoy sobre el acuerdo. La presidenta del PP de Guipúzcoa, María San Gil, acusó al PSE de incurrir en una 'contradicción' al rechazar las cuentas del Gobierno vasco y apoyar las de la Diputación.