La apuesta de las universidades jóvenes

'De la puerta de la universidad para dentro, no hay diferencias entre títulos propios y oficiales. Nuestro objetivo es reducirlas al máximo, al menos en el ámbito valenciano', indica Juana Gallar, vicerrectora de la Universidad Miguel Hernández, quien ha elevado el plan de estudios del recién nacido diploma de especialización profesional en Administración Pública a la consejería 'para que estudie la validez legal con el plan de estudios en la mano dentro del territorio'. A la espera de que la Administración estudie la materia estructurada en 100 créditos, en mes y medio concluirá el plazo para que la universidad posibilite nuevos títulos para 2003. Este curso se ha caracterizado por una copiosa cosecha, porque además del anterior, han comenzado el diploma de especialización en Dirección y Gestión de Organizaciones No Lucrativas y de Servicios de Bienestar Social y el título superior en Protocolo y Relaciones Institucionales. Además, por segundo año consecutivo la universidad ilicitana permite formar a profesionales de artistas a través del título propio en Danza Contemporánea, 'único en España', según Gallar. 'La formación oficial está más encorsetada, aparte de ser lenta de tramitar pues debemos solicitar una titulación con un plazo mínimo de 18 meses; en cambio, un título propio se aprueba con más celeridad', dice la vicerrectora.

Para el curso 2002-2003 la Universidad Jaume I no implantará ningún título propio de pregrado, porque está inmersa en la elaboración de una normativa conducente a regular esta enseñanza. El nuevo centro de Postgrado, que estará finalizado dentro de un año, y para el que se han invertido 567 millones de pesetas, permitirá habilitar espacios para incrementar el catálogo de títulos propios.