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Reportaje:

Nuevo intruso en aguas del delta

Una especie de pez exótico procedente de Asia coloniza en poco tiempo los canales del Ebro

Una nueva especie piscícola foránea invade las aguas del delta del Ebro. Los ictiólogos lo llaman Rasbora y procede del continente asiático. De momento, poca cosa más han podido averiguar los técnicos del parque natural, que no han acertado en determinar de qué especie concreta se trata -creen incluso que podría haber más de una entre los ejemplares capturados- ni su procedencia exacta.

Expertos universitarios de Barcelona y Madrid están estudiando algunos ejemplares. La presencia del Rasbora fue advertida por vez primera en 1999 en el canal de riego de la izquierda del delta. En aquel momento, los técnicos creyeron que el único ejemplar hallado no conseguiría adaptarse. 'Pensábamos que no pasaría el invierno', apunta Francisco Vidal, veterinario del parque natural. Pero durante los dos últimos años han comprobado que, lejos de extinguirse, el Rasbora se adaptaba perfectamente al hábitat del delta y se reproducía con una frecuencia considerable. Pese su escasa longitud (unos ocho centímetros como máximo) y la apariencia cercana a un barbo diminuto de cuerpo cilíndrico y alargado de color gris plateado, los especialistas del parque han podido apreciar que se trata de un pez agresivo y dominante, por lo menos en cautividad. A falta de más indicios sobre su evolución en la zona, subrayan que su presencia podría contribuir a mermar o a desplazar especies de su tamaño que habitan en las lagunas y canales del delta, como el gambusino, introducido en el siglo XIX. La nueva especie no ha sido observada aún en el cauce del río, pero ya ha sido localizada en el hemidelta derecho.

La introducción y adaptación de especies foráneas en las aguas del Ebro ha sido un reiterado y problemático fenómeno en la zona durante las últimas décadas. La aparición de depredadores como el siluro, procedente de Europa central e introducido por pescadores alemanes con finalidades deportivas, desplazó y contribuyó a extinguir las especies autóctonas.

En este caso concreto, los técnicos creen que la introducción del Rasbora, de escaso interés ornamental, pudo producirse precisamente junto a otras especies que estaban siendo transportadas a alguna piscifactoría del delta.

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