Bruselas pide a Italia que aclare su visión de Europa

Mario Monti, el poderoso comisario europeo de Competencia, ha pedido a Silvio Berlusconi que clarifique su visión europeísta a fin de serenar la inquietud que en la UE ha causado la dimisión de Renato Ruggiero, 'una dura pérdida para Europa e Italia', según el comisario. Monti declinó la oferta de ser ministro de Exteriores cuando el primer ministro italiano se lo ofreció antes de constituir Gobierno, hace siete meses, y, según fuentes de su entorno, no tiene intención de aceptar, por ahora, ninguna cartera ministerial.

'A título personal respondo que mantengo obstinadamente la confianza en el compromiso europeo de Italia y de este Gobierno', señala el ex rector y profesor de Economía Política de la Universidad Bocconi de Milán en una declaración escrita difundida a los medios en Bruselas. Sin embargo, solicita al primer ministro italiano un claro compromiso con la UE. 'La hora de la verdad ha llegado (...), debe definir claramente' su línea política hacia Europa como lo hizo el anterior Gabinete en casos como la participación militar en Albania y Kosovo o el apoyo en el Parlamento Europeo a la Comisión Prodi. 'Deberá acometer el debate necesario sobre la política europea en el seno de la mayoría' de Gobierno.

Según Monti, que no tiene filiación política, pero que llegó a Bruselas de la mano de Berlusconi en 1995, Il Cavaliere quiere 'más integración europea, fundada sobre el método comunitario antes que sobre el intergubernamental, una Europa concentrada sobre las competencias esenciales, dotada de todos los poderes necesarios, pero delegando en los Estados y las regiones lo que se hace mejor de forma descentralizada'.

Modelo de Italia

'En resumen, una Italia más afirmativa, pero con el objetivo de hacer prevalecer un modelo europeo que le conviene', agrega. Para afirmar esta visión, opina el comisario de Competencia, 'Berlusconi deberá definirla con más atención de lo que lo ha hecho hasta el presente'.

Fuentes próximas a Monti, el comisario mejor valorado por los medios y poco amigo de declaraciones gratuitas, daban ayer por descontado que consultó a Romano Prodi, presidente de la Comisión e italiano como él, su intención de hacer un comentario claro y firme sobre la situación de su país. Prodi se ha mostrado bastante prudente sobre la crisis política en Roma, aunque en privado no oculta preocupación. Analistas y diplomáticos europeos creen que Monti podría ser un excelente ministro de Exteriores en el caso de que Il Cavaliere se lo volviera a proponer. Sin embargo, fuentes de su entorno creen que por el momento esa idea es impensable.