Los donantes siguen acudiendo en gran número para paliar la escasez de sangre
El hospital Clínic de Barcelona dobló ayer el número de camillas y efectivos para atender la avalancha de donantes de sangre que acudieron durante toda la jornada en respuesta al llamamiento que realizaron los responsables del Departamento de Sanidad de la Generalitat ante el escaso número de bolsas de sangre que había en los hospitales públicos de Cataluña.
El banco de sangre del Clínic era el único que permanecía abierto ayer en Barcelona, por lo que los servicios de urgencia del resto de los centros, entre ellos Vall d'Hebron y Bellvitge, remitieron a casi un centenar de donantes a este hospital durante toda la jornada. Las pocas reservas de los bancos de sangre, que antes de este fin de semana se encontraban al 40% de su capacidad, habrían llevado a suspender algunas operaciones quirúrgicas programadas para después de las fiestas de Navidad. Sanidad advirtió de que, si no se remediaba la situación, sólo quedaban reservas para una semana.
Sin embargo, la respuesta ciudadana sorprendió a los propios responsables de Sanidad. Durante el pasado sábado se realizaron 1.151 donaciones, cifra que rebasó todas las expectativas. Por ese motivo y para poder atender todas las donaciones que puedan realizarse a partir de hoy, el personal sanitario de los bancos de sangre de los grandes hospitales de Cataluña se incorporará a su trabajo de manera anticipada.
Frío y resfriados
El frío y los resfriados habían motivado que algunos donantes dejaran de responder a las campañas de donación de sangre que se organizan. Los responsables de los bancos de sangre aseguran que en diciembre siempre bajan las donaciones el 25%, pero este año se habían reducido a la mitad.
El pasado viernes, los hospitales catalanes contaban con 2.700 bolsas de sangre, cuando lo ideal sería que hubiera 5.000. En el hospital de Vall d'Hebron de Barcelona, que tiene el mayor banco de sangre de Cataluña, habitualmente hay unas 4.000 bolsas de sangre, mientras que el viernes no sobrepasaban las 1.800.
Los donantes habituales de Cataluña son unos 70.000; aunque se considera una cifra insuficientes, en los últimos dos años el índice de donación ha aumentado de 35 a 38 donantes por 1.000 habitantes, situación que todavía está lejos de la media de otros países europeos, en los que se alcanzan los 45 donantes por 1.000 habitantes.
Por otra parte, el número de personas atendidas por los servicios de urgencia de los hospitales a causa de la gripe continúa dentro de la normalidad, según informaron fuentes de Sanidad. La Administración está en alerta ante la epidemia de gripe que se espera que llegue a Cataluña durante la primera semana de enero.
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