El primer ministro de Serbia insta a los criminales de guerra a entregarse
El primer ministro de Serbia, Zoran Djindjic, artífice de la entrega del ex presidente Slobodan Milosevic al Tribunal Penal Internacional de La Haya para los crímenes cometidos en la antigua Yugoslavia (TPIY), declaró que los criminales de guerra fugitivos deberían entregarse si se consideran inocentes.
Por otra parte, el Partido Democrático Serbio (SDS), el grupo más fuerte de los nacionalistas serbios de Bosnia-Herzegovina, acordó en Banja Luka excluir de sus filas a sus más destacados fundadores, entre ellos el tristemente célebre Radovan Karadzic, buscado por el TPIY por crímenes de guerra.
Sostiene Djindjic, en entrevista con la agencia independiente Beta: 'Si un acusado cree que no hay pruebas en su contra, no veo por qué no podría entregarse y liberar al Gobierno y a ellos mismos de esta gran presión'. Añade el primer ministro serbio: 'Por otra parte, si ellos creen que hay evidencias en su contra, ¿por qué habría que protegerlos?, ¿por qué no tendríamos que enviarlos a La Haya?'.
Djindjic decidió el pasado junio entregar a Milosevic al TPI.Con esta decisión, Dindjic abrió una grieta mayor en sus relaciones con el presidente de Yugoslavia, Vojislav Kostunica, quien calificó de ilegal la extradición del déspota. Kostunica quiere que las extradiciones de criminales de guerra yugoslavos a La Haya se regulen por una ley. El tema constituye un foco permanente de crisis entre las instituciones serbias y yugoslavas. La Fiscalía del TPIY considera que la actitud de Kostunica enmascara una táctica dilatoria para impedir la entrega de otros criminales de guerra todavía en libertad.
Expulsan a Karadzic
El SDS de Bosnia-Herzegovina, el partido de los nacionalistas serbios fundado por Karadzic, modificó sus estatutos para expulsar a los sospechosos de crímenes de guerra. La reforma estatutaria del SDS implica la expulsión de su fundador, el más famoso de los presuntos criminales de la guerra de Bosnia: el psiquiatra y poeta Radovan Karadzic. Además de Karadzic, el SDS expulsó a la ex presidenta de los serbios de Bosnia, Biljana Plavsiv, quien se entregó de forma voluntaria al TPIY y disfruta de libertad provisional en Belgrado, y al ex presidente del Parlamento de los serbios de Bosnia, Momcilo Krajisnik, quien se encuentra preso en La Haya en espera de juicio.
Karadzic, el presunto criminal de guerra más buscado, parece que se esconde en las montañas de Bosnia o de su país natal, Montenegro. Según algunas versiones, Karadzic goza de la protección de monasterios de la Iglesia ortodoxa donde se refugia, se ha dejado crecer una barba e incluso se desplaza disfrazado de pope. La expulsión de Milosevic del SDS que fundó no significa que se quede sin hogar político. El ultranacionalista Partido Radical de Serbia (SRS), en la oposición en Belgrado, ha ofrecido acoger en sus filas 'a los renombrados patriotas y héroes de guerra' Karadzic, Krajisnic, al ex general Ratko Mladic' y a cuanto presunto criminal de guerra circule por Serbia. Para el SRS, todos ellos son 'serbios honestos'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.