La subida de tarifas del transporte público

La subida de casi el 10% del metrobús, que usamos casi la mitad de los viajeros de metro y de autobús en Madrid, es la mayor falta de vergüenza y de coherencia política que recuerdo desde que tengo uso de razón. Y ya empiezo a peinar canas. ¿Cómo se puede animar a la gente a usar el transporte público y al mismo tiempo aplicar ese tarifazo? ¿Es ésta la manera que tienen los señores Ruiz-Gallardón y Álvarez del Manzano de contribuir a frenar la inflación? Lo peor es que seguirán ganando elecciones por mayoría absoluta.

Decidí escribir esta carta un viernes, mientras esperaba durante 20 minutos la llegada del autobús de la Empresa Municipal de Transportres de la línea 28. En la parada, la gente, indignada, no hablaba de otra cosa.- Javier de la Oliva Agulló. Madrid.

Es vergonzosa la campaña del transporte público que hay estos días en televisión, y más vergonzosa, si cabe, la subida de los precios. Venga con nosotros, señor Álvarez del Manzano, en un autobús de la Empresa Municipal de Transportes en las horas punta (que son muchas) y vea cómo no pueden circular y, por lo tanto, cómo nos tragamos los mismos atascos que los vehículos privados. Conclusión: voy en mi coche sentada, más calentita y oyendo la radio. Venga con nosotros, señor alcalde de Madrid, en el metro: empujones, sudores, olores... paradas en medio de los túneles, etcétera. Conclusión: utilizo mi coche y por lo menos no sufro estas incidencias.

Venga con nosotros, señor Álvarez del Manzano, andando en cinco minutos de la Puerta del Sol a Cibeles (¡batiría todos los récords!) entre las innumerables obras que hay por toda la ciudad. En fin, señor alcalde, use un solo día, de verdad, el transporte público de su ciudad; a mí se me caería la cara de vergüenza.- María José Sánchez. Madrid.

He pensado muchas veces en escribir un libro con la ingente cantidad de cosas extrañas que ha dicho el señor alcalde, José María Álvarez del Manzano, desde que es regidor de Madrid. La última, la de que 'la subida del transporte la deben pagar los usuarios' porque 'no sería justo que la pagaran los que no lo usan', me parece inaceptable.

Entonces, como yo no tengo automóvil, que me resten de mis impuestos la ingente cantidad de dinero que se me va en las autopistas y otras infraestructuras automovilísticas; como hace seis años que no voy al médico, que me descuenten de mi cuota de la Seguridad Social la parte proporcional que me han estado reteniendo; como no me gusta el fútbol...

Y así un largo etcétera. Favorecer el transporte público y otros medios alternativos de transporte en la ciudad, como la bicicleta, es favorecer una movilidad sostenible, una movilidad más acorde a los tiempos que corren, que es algo que, en la ciudad de Madrid, con este tipo de gestiones que tenemos, está muy lejos de conseguirse.- Juan Merallo Grande. Pedalibre. Madrid.