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EN LA ANTESALA DE LAS TRANSFERENCIAS SANITARIAS

Oposición, sindicatos y vecinos inician la protesta contra la ley sanitaria

Oriol Güell

Rechazo de los agentes sociales y apoyo de los colegios profesionales. Así se resumen las reacciones que ha provocado el anteproyecto de la Ley de Ordenación Sanitaria (Loscam) que la Asamblea aprobará antes de fin de año. Los partidos PSOE e IU, los sindicatos UGT y CC OO, y la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos han iniciado movilizaciones contra la ley con la manifestación conjunta prevista para el próximo miércoles. Los colegios de médicos, enfermeros y veterinarios, por su parte, han destacado las mejoras que, en áreas como la salud pública, recoge el texto.

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La Loscam ha generado rechazo entre los agentes sociales incluso antes de que su anteproyecto fuera llevado al Consejo de Gobierno para su aprobación. Prácticamente todas las críticas que ha recibido empiezan por 'no': no ha sido una ley consensuada; no equipara salarialmente a los trabajadores procedentes del Insalud con los de la Comunidad, pese a realizar las mismas funciones; no prevé la construcción de nuevos hospitales; no tiene un centro de planificación sanitaria fuerte...

Sin embargo, el mayor temor de oposición y sindicatos es 'la descapitalización de la sanidad pública en favor del sector privado que provocará la creación de las agencias sanitarias', coinciden en señalar Lucas Fernández, del PSOE, y Gabriel España, secretario de Sanidad de UGT-Madrid. Las agencias permitirán al paciente elegir dónde quiere ser operado, incluidas las clínicas privadas concertadas (que prestan servicios a cambio de una subvención pública). Por eso, temen Fernández y España, Sanidad destinará cada vez más dinero a pagar operaciones en el sector privado y menos en inversiones en los centros públicos.

El frente opositor a la Loscam, formado por PSOE, IU, UGT, CC OO y la Federación de Asociaciones de Vecinos, principalmente, ha puesto en marcha un calendario de movilizaciones que se abre con la manifestación convocada para el miércoles. UGT y CC OO, con un 40% de apoyo entre los trabajadores del sector, amenazan, además, con una huelga general en la sanidad. El paro, que fue convocado inicialmente por UGT para el pasado 12 de diciembre, ha sido consensuado con CC OO y ambos sindicatos lo utilizan actualmente como amenaza en las negociaciones que tienen con la consejería.

La principal protesta de los sindicatos es la decisión de Echániz de no igualar el sueldo de los 45.000 trabajadores de los 17 hospitales que Sanidad recibirá del Insalud al salario que cobran los trabajadores que están ya en plantilla de la consejería. UGT cifra la diferencia salarial en un 16% entre 'trabajadores que realizan el mismo trabajo para la misma consejería, pero en hospitales distintos', según Gabriel España, secretario de Sanidad de UGT-Madrid.

Sanidad no ha articulado un mensaje claro sobre sus intenciones en este conflicto. Echániz afirmó, el pasado junio, que no subiría el sueldo a los empleados del Insalud hasta dentro de 'ocho o 10 años'. Sin embargo, el pasado 29 de noviembre anunció en el Parlamento regional un Plan de Calidad para la sanidad que incluía una 'equiparación laboral' en unos cinco o seis años. El mismo día, no obstante, la consejería defendía que esta equiparación no se refería a los salarios.

Con estos mensajes, hasta los sindicatos están confundidos: 'Aún no entiendo la equiparación laboral de la que habla Echániz, sinceramente', comenta Joaquín Pérez Argüelles, vicesecretario general del sindicato médico mayoritario (CESM-Madrid). 'La Consejería de Sanidad nos está hablando de una equiparación salarial en un plazo de dos o tres años', asegura por su parte José María Porras, secretario regional del sindicato mayoritario del personal de enfermería (Satse).

Pese a que Sanidad insiste en que la Loscam ha sido una 'ley negociada y consensuada con todos los agentes sociales', CC OO y UGT dicen que sólo han detectado disposición al diálogo desde hace unos días. 'Echániz ha empezado a concretar ahora, por fin, lo que él entiende por equiparación laboral. No compartimos sus propuestas, pero al menos hemos empezado a hablar de una vez', explican fuentes de ambos sindicatos, que advierten de que hay 'un frente conjunto de sindicatos, partidos y vecinos contra la Loscam' que mantendrán 'sin fisuras'.

Según estos sindicatos, la primera propuesta de la consejería habría sido firmar un acuerdo de mínimos en el marco del Consejo de Madrid, que ha sido rechazado. Las intenciones de Sanidad, aseguran estas fuentes, pasan por vincular la equiparación salarial con el Plan de Calidad en la sanidad anunciado por Echániz. Los detalles de este plan no han trascendido aunque, según diversas fuentes, incluyen nuevas inversiones, ofertas salariales a los trabajadores a cambio de una mayor flexibilización laboral y la aplicación de las nuevas tecnologías en la sanidad. El Plan de Calidad de Echániz ha conseguido diluir la oposición de todos los sindicatos de la sanidad a la Loscam: el sindicato de enfermería Satse se ha alejado de las otras centrales y ha mostrado su disposición al diálogo.

La Loscam ha logrado el apoyo de otros actores de la sanidad, especialmente el de los colegios profesionales de médicos, personal de enfermería y veterinarios. Juliana Fariña, presidenta del Colegio de Médicos de Madrid, defiende la 'estabilidad en el empleo y la promoción de la investigación y formación que consagra la ley'. Fariña también destaca los beneficios que tendrá para pacientes y médicos 'la exigencia de que los centros privados concertados deban tener los mismos equipos técnicos y humanos que hasta ahora sólo se exigía a los hospitales públicos'.

Echániz ha heredado también un reguero de quejas en varios municipios de la región que protestaban contra el Insalud, pero que ahora miran ya a la consejería, tras ver que la Loscam no satisface sus demandas. Aranjuez, en el área sanitaria 11, y Parla, en la 10, llevan años reclamando un hospital comarcal. Echániz frustró sus esperanzas al sentenciar que 'Madrid tiene suficientes camas hospitalarias' y descartar la construcción de nuevos hospitales, excepto los ya proyectados en Fuenlabrada, Majadahonda y la maternidad de la calle de O'Donnell.

'Aranjuez lleva años esperando un hospital comarcal. Lo prometió el propio Ruiz-Gallardón en un mitin en la ciudad', lamenta José Luis Moreno, edil socialista en la localidad. En Parla, 30.000 personas se echaron a la calle el pasado 31 de septiembre para exigir un hospital comarcal que libre a sus ciudadanos de tener que acudir al de Getafe. Las quejas se repiten: un hospital saturado al que se accede por unas carreteras con problemas de tráfico.

Otras protestas, como el servicio de ambulancias en Fuenlabrada, Alcalá de Henares o el suroeste, o la saturación de los centros de salud en Pozuelo o Tres Cantos, ya no exigen soluciones al Insalud, sino a Echániz.

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Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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