_
_
_
_
_

Zaplana asume que el crecimiento económico será menor del previsto en el presupuesto

El jefe del Consell dice que los partidos nacionalistas son una dificultad para el desarrollo

El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, asumió ayer que el crecimiento económico valenciano será menor del previsto (un 3%) en el presupuesto de la Generalitat para el año 2002. Zaplana pronunció una conferencia organizada por el Foro de Opinión de Valencia destinada a argumentar que los partidos nacionalistas, en la actual situación política, son una dificultad para el desarrollo. En un discurso trufado de su triunfalismo habitual, Zaplana reajustó alguna de sus ideas para ponerlas más en consonancia con el argumentario del Gobierno de Aznar.

Zaplana armó ayer su discurso sobre la base firme del optimismo y los logros obtenidos al frente del Consell. Una base argumental que ya es habitual en sus intervenciones, pero que en esta ocasión introdujo tres elementos novedosos: el reconocimiento de que la crisis económica internacional también tendrá repercusiones en la Comunidad Valenciana; la confesión de que su indudable influencia en el Partido Popular no ha tenido el mismo reflejo en el reparto de las inversiones del Gobierno Aznar y; por último, la conveniencia de empezar a escribir la historia de los gobiernos Zaplana. El presidente de la Generalitat arropó todo este argumentario con un alegato sobre la idea de España del PP y el envejecimiento ideológico de los partidos nacionalistas.

El presidente de la Generalitat, arropado por todo su partido, se mostró suelto durante su alocución en un céntrico hotel de Valencia. Ante un auditorio volcado, con la excepción de José María Chiquillo (UV) y Pere Mayor (Bloc) como convidados de piedra y la pequeña célula consentida del Grup d'Acció Valencianista (que silbó e interrumpió pero sin pasarse), el presidente de la Generalitat se presentó como un mago de las comparaciones. Tras explicar que las economías de Estados Unidos, Japón y Alemania no crecerán o lo harán muy poco, Eduardo Zaplana reconoció: 'Nosotros a lo mejor revisaremos un poco las previsiones de crecimiento económico de acuerdo con las nuevas estimaciones del Gobierno y de la Unión Europea, pero seguiremos creciendo más que la media'. 'Y si la crisis se va a superar en el último trimestre de 2002, vamos a estar mejor para la nueva etapa de crecimiento', sentenció.

El dirigente popular justificó el crecimiento de la Comunidad Valenciana en sus años de gobierno por su apertura a España frente a la cerrazón de Cataluña o el País Vasco gobernados por partidos nacionalistas. Eduardo Zaplana se atribuyó la actual proyección nacional e internacional de la Comunidad Valenciana pero reconoció que 'no es verdad' que se haya producido un exceso de inversiones del Gobierno central respecto a otras autonomías, ni que el PP haya impulsado el eje Madrid-Valencia frente al eje Madrid-Barcelona. El responsable del Consell, ya en el turno de preguntas, explicó: 'Se me otorga en mi partido más influencia que a otros presidentes autonómicos, pero no creo que me traten mejor'.

El tercer elemento adelantado por Zaplana fue el anuncio de que el próximo año su partido elaborará un documento sobre la Comunidad Valenciana para los próximos 15 años para trasladar su experiencia desde su etapa de gobierno. Un concepto con el que Zaplana piensa ya no sólo en hacer historia sino en escribirla y dejarla para la memoria. 'Los mayores éxitos los vamos a recoger dentro de mucho tiempo, cuando perdamos las elecciones porque se valorará el periodo de transformación real de esta Comunidad', manifestó.

Valencianismo

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Y todo esto con la excusa de hablar de los nacionalismos y reforzar la idea de España defendida por el PP, que reclama el cierre definitivo del proceso autonómico. Eduardo Zaplana a los nacionalismos de casa 'sin atacar, ni criticar a nadie', los ninguneó. Recordó, sin mencionarlos por su nombre, que ni Unión Valenciana ni el Bloc Nacionalista Valencià obtuvieron el 14% de los votos en total en el mejor de sus momentos. Tan del pasado son los nacionalismos periféricos, según Zaplana, que sólo salvó para el patrimonio del PP el concepto de valencianismo, pero sin entrar ya ni a mencionar una supuesta reforma del Estatuto que ha entretenido a las Cortes Valencianas durante más de una legislatura. 'El error es pensar que el momento político de la transición no ha variado y que se puede vivir anclado en el pasado de pedir a Madrid y que me den', prosiguió el jefe del Consell. 'Los gobiernos [autonómicos] tenemos que trabajar y dar cuenta de nuestra gestión. No miren a nadie más, mírennos a nosotros', añadió.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_