Francia otorga el asilo a varios padres para evitar la ablación de sus hijas

Francia ha otorgado el estatuto de refugiado a una pareja de malienses y a una madre somalí que se negaron a que a sus hijas les practicaran la ablación del clítoris en sus países de origen, según anunció ayer la Comisión Francesa de Recursos de Refugiados. En España, el Congreso debatió este año una medida similar pero finalmente sólo acordó 'reforzar la protección' de los poderes públicos en España a las inmigrantes que 'se hayan visto obligadas a abandonar su país de origen' para huir de este tipo de violencia.

La Oficina Francesa de Protección de los Refugiados (Ofpra) había negado el asilo en primera instancia a Mossa y Nacira Sissoko, una pareja de malienses que pretendía eludir la ablación del clítoris de su hija, nacida en 1999. La familia vivía en la región de Kayes, en la que en torno al 95% de las niñas han sufrido mutilación, y donde la negativa de los padres provocó actos de violencia contra el progenitor. La Ofpra no cuestionaba los hechos, pero consideraba que la protección que solicitaba la familia no tenía cabida en la Convención de Ginebra sobre el asilo. La comisión de recursos se quejó de que los dos padres 'habían solicitado en vano la protección contra estas amenazas y agresiones'. Awa Omar Guedi, una somalí cuya primera hija había muerto por la ablación de una parte de sus órganos genitales, salió de su país para evitarle una mutilación similar a una segunda hija.