La Ópera de Roma lleva a Sevilla los dramáticos amores de 'Il trovatore'
La obra de Verdi se estrena hoy en el Teatro de la Maestranza
La música de la ópera Il trovatore, de Giuseppe Verdi, sonará a partir de hoy en el Teatro de la Maestranza de Sevilla. El director musical, Maurizio Arena, señaló ayer, en la presentación de esta ópera, que 'ocuparse hoy de Il trovatore es una aventura extraordinaria'. Arena recordó que 1853 fue un año inolvidable para Verdi porque 'dio vida a tres óperas importantísimas: Il trovatore, Rigoletto y La traviata'. Alberto Fassini es el director de escena. Il trovatore se representará todos los días a las 20.30 hasta el próximo martes.
La obra cuenta con un doble reparto que se alternará a lo largo de las seis funciones. El papel de Manrico lo interpretarán los tenores Dario Volonté (días 25, 27, 29 y 31) y Renzo Zulian (26 y 30). Leonora será encarnada por las sopranos Zvetelina Vassileva (25, 27 y 31) y Anda-Louise Bogza (26, 29 y 30). Los barítonos Roberto Frontali (25, 27, 29 y 31) y Marco Vratogna (26 y 30) interpretarán al Conde Luna. Las mezzosopranos Luciana d'Intino (25, 27, 29 y 31) y Eugenie Grunewald (26 y 30) serán la gitana Azucena. Il trovatore es una producción de la Ópera de Roma.
Verdi (1831-1901) escribió la música sobre un libreto de Salvatore Cammarano (1801-1852) basado en la tragedia del dramaturgo chiclanero Antonio García Gutiérrez (1813-1884). La ópera, que transcurre en Vizcaya y Aragón a principios del siglo XV, narra los dramáticos amores de Leonora y Manrico. Arena definió Il trovatore como 'una obra en llamas, inflamada'. 'Il trovatore es un gran fresco en el que se suceden una serie de cuadros extraordinarios', comentó el director musical.
'Ha sido una experiencia humana y artística intensísima. Il trovatore, La traviata y Rigoletto son el corazón del melodrama. Se cantan en estas óperas sentimientos universales: la venganza, el deseo, el poder, el amor, la renuncia, el sacrificio...', relató Arena.
El director musical recalcó la complejidad 'de establecer un hilo' de conexión en Il trovatore y, a la vez, 'dar a cada episodio una libertad expresiva grande'. Arena resaltó la dificultad de la obra al recordar cómo en 'tres minutos' hay 'cantos totalmente diferentes'. 'Todo forma un mosaico que cuesta mucho trabajo montar y reunir', concluyó Arena.
Dario Volonté explicó que su papel 'es un rol mítico, que tiene mucho de circense'. 'A nivel musical es una ópera muy atractiva. La traviata, Il trovatore y Rigoletto son conocidas porque el público las escucha un par de veces y las retiene en la memoria', indicó el tenor.
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