Jornadas de música extranjera

La agenda musical del fin de semana se presenta bien surtida de artistas extranjeros dispuestos a dar cuenta de sus últimos trabajos en Euskadi. Éste es el caso, por ejemplo, de la cantante portuguesa Mísia, quien esta misma noche presentará en el Teatro Arriaga de Bilbao los fados contenidos en su sexto disco, Ritual (Erato - Warner). En este homenaje a la difunta Amália Rodrigues, la fuerza de su voz se pone nuevamente al servicio de poemas dolientes sobre penas, amores, ríos sin orillas y lunas que no alumbran.

'Ha sido siempre un lamento asociado a la nostalgia portuguesa, a la musicalidad del inmenso mar que tenemos enfrente; un lamento que habla del destino, de la vida, de la muerte, del amor y de la soledad. Ésa es su naturaleza'. Así ha definido su verdadera especialidad, el fado, Mísia, una artista que ha prestado su voz a textos de Fernando Pessoa, António Botto, Carlos Drummond de Andrade, Natália Correia, José Saramago y Mário se Sá-Carneiro, entre otros.

El próximo domingo serán los miembros de Hooverphonic los que se acerquen a la sala Jam de Bergara para presentar ante el público vasco, como ya hicieran el pasado 8 de febrero, las composiciones de The magnificent tree. Así se titula el tercer disco del trío belga, un trabajo en el que se funden la esencia del pop ambiental, ritmos sintéticos, samples de David Crosby, instrumentos poco habituales como el theremin, su gusto por las programaciones electrónicas y hasta las voces de un coro infantil. Con dicha fórmula han captado la atención, al menos, de los miles de personas que han comprado sus discos y de los publicistas que trabajan con Jaguar, Repsol, Toyota o Viceroy, ya que sus canciones amenizan los anuncios de esas empresas. En los largometrajes Belleza robada y Sé lo que hicisteis el último verano, y en las series de televisión Nikita y Los vigilantes de la playa también suena la música de una banda que se formó a mediados de los años noventa. Entonces su referente era la música de artistas y compositores como Angelo Badalamenti, Portishead y Massive Attack.

Retomando la programación bilbaína, uno se encuentra con que esta noche actúa Matt Harding en el Kafe Antzokia. El guitarrista, cantante y compositor de Salt Lake City subirá al escenario acompañado por el organista Mikel Azpiroz y el batería Karlos Aranzegi, los músicos autóctonos que repasan junto a él el repertorio de Lovely lady (Soularium - Dock). Una docena de canciones componen un estreno en el que se funden retales blues, soul, riffs que podría apadrinar Lou Reed (Lovely day), una adaptación de Taj Mahal (Lovin' in my baby's eyes) y los aires campestres que inevitablemente aportan guitarras acústicas y armónicas al entrelazarse.

Dos de California

Otros estadounidenses que visitan estos días Bilbao son Good Riddance. El cuarteto de Santa Cruz (California) tocará el domingo, en Bilborock, las canciones de Symptoms of a Leveling Spirit. Así se llama el quinto elepé de esta formación de punk rock y hardcore que, además de adaptar el In my head de Psychadelic Furs, no elude abordar temas sociales en sus textos. Antes que Good Riddance subirá a escena otro quinteto californiano: Death By Stereo.

Asimismo, Experience actúa el domingo en la sala Azkena de la capital vizcaína. El conjunto francés, encabezado por el ex Diabologum Michel Cloup, presentará Aujourd'hui, maintenant. LP, un debú en el que se evidencia su pasión por el rock crudo, de guitarras distorsionadas. 'Me identifico con Jon Spencer Blues Explosion o dEus, con ese lado muy bruto, ese calor', ha señalado Cloup.

Compitiendo con la oferta foránea aparece Manolo García, cuya gira recala hoy en el pabellón Buesa Arena de Vitoria. Allí se podrá contemplar el espectáculo con el que presenta en vivo su segundo elepé en solitario, Nunca el tiempo es perdido, un concierto que en el plano instrumental incluye violines, percusión y teclado.

Nunca el tiempo es perdido luce en su contraportada los logotipos de la multinacional Ariola y de Perro Records, la discográfica del propio Manolo García, y no se aleja en exceso de la senda transitada por su autor desde los años ochenta. Hay espacio para un pop de poso aflamencado, aderezado en ocasiones con detalles arábigos, hindúes, programaciones y arreglos nada estridentes, y potenciado con textos de regusto poético. Como ya pasara con los dibujos del anterior Arena en los bolsillos, las fotografías que ilustran la nueva entrega, grabada en Cataluña y París, y mezclada en Los Ángeles (Estados Unidos), han sido realizadas por el cantante.

De ese modo, se confirma la condición de artista multidisciplinar de Manolo García. Éste alcanzó la fama como miembro del dúo El Último de la Fila pero, mientras la actual propuesta de su ex compañero Quimi Portet ha quedado para deleite de un público muy especializado, su producción en solitario le ha confirmado como superventas. De su primer disco se despacharon más de 800.000 ejemplares.

La cartelera teatral, además de la destacada presencia de La Fura Dels Baus en la Feria de Muestras de Bilbao, incluye otro plato fuerte: el estreno en Euskadi de la adaptación de Otelo, el moro, original de William Shakespeare, creada por el Centro Andaluz de Teatro.

'Otelo, el moro, es la tragedia de un hábil estratega y amante esposo que se traga de un sorbo todas las calumnias que inventa Yago, uno de sus subalternos, y que, arrastrado por los celos, acaba asesinando a su mujer por una infidelidad que no ha cometido'. Así reza la sinopsis de un montaje en el que intervienen 12 actores andaluces, y que aborda cuestiones de actualidad como el maltrato doméstico, la xenofobia y la infidelidad.

'Otelo, convertido en asesino, no tiene justificación ni atenuantes, y su acción viene a resonarnos con el mismo eco de los muchos crímenes y malos tratos a mujeres que avergüenzan nuestra comunidad en estos días', ratifica el director Emilio Hernández.