Los comerciantes piden medidas contra los ladrones multirreincidentes

El presidente de la Confederación de Comercio de Cataluña (CCC), Pere Llorens, ha pedido a la delegada del Gobierno en Cataluña, Julia García-Valdecasas, que convoque de manera 'urgente' el Consejo de Seguridad debido a la inquietud del sector por el incremento de la inseguridad ciudadana. En la carta dirigida a la delegada, Llorens asegura que los altercados producidos por las manifestaciones antiglobalización, los problemas relacionados con la inmigración ilegal y los conflictos con los okupas han alterado 'la vida cotidiana de la ciudadanía y han creado alarma social'.

El secretario general de la CCC, Miguel Ángel Fraile, afirmó que la policía ha detectado que entre julio y septiembre se han registrado en la ciudad de Barcelona 30.000 robos, el 4% más que el año pasado, con especial incidencia en los comercios.

En el próximo consejo de seguridad urbana, los comerciantes pedirán datos sobre el funcionamiento de los juicios rápidos y una solución para el hecho de que la multirreincidencia no esté penada si el robo es inferior a 50.000 pesetas. La CCC pedirá que se regulen las responsabilidades civil y penal de los convocantes de manifestaciones cuando haya altercados y se responsabilicen de pedir protección a las fuerzas del orden público si ellos no pueden garantizar la seguridad.

De acuerdo con Fraile, los altercados de la manifestación antiglobalización que se celebró hace unos meses en el paseo de Gràcia de Barcelona causó al comercio de la ciudad más de 100 millones de pesetas de pérdidas.

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, defendió ayer la 'necesidad' de que se cambie la ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para 'luchar contra los delincuentes multirreincidentes'. Clos pidió que la ciudadanía no confunda 'delincuencia con inmigración'.

Según el alcalde, de los aproximadamente 450 delincuentes multirreincidentes que operan en la ciudad, 'sólo el 50% son inmigrantes', cifra 'muy pequeña', dijo, si se compara con los casi 140.000 inmigrantes que viven en Barcelona.