700 trabajadores de Santana se manifiestan en Jaén para oponerse al plan de privatización de la Junta

Los trabajadores de Santana volvieron a protagonizar ayer otra jornada de movilizaciones que comenzó con una huelga en la factoría de Linares de cuatro horas en cada turno. Tras celebrar una asamblea en las puertas de la empresa a las diez de la mañana, unos 700 empleados cogieron sus vehículos con destino a la capital para manifestarse en la Delegación de Empleo y la Subdelegación del Gobierno.

Ante la Junta reclamaron mejores condiciones laborales para los que tienen que pasar a las empresas privadas, casi 400 personas, y ante la representación del Gobierno central exigieron su implicación económica para poder sacar adelante el plan de viabilidad.

Las manifestaciones se realizaron con normalidad, aunque entre gritos reivindicativos, pero el regreso desde Jaén a Linares se hizo también como un acto de protesta a velocidad lenta, lo que provocó retenciones de hasta dos kilómetros en la carretera que une la capital con la autovía de Andalucía.

Santana tiene 1.032 trabajadores, aunque sólo 631 de ellos en la empresa matriz, ya que el resto se desgajó el pasado mes de diciembre pasando a Útiles del Sur. Son los empleados que están en esta última los que pasarán a empresas privatizadas con unas condiciones laborales que no son las exigidas por el comité de empresa y los trabajadores.

Juan Salazar, presidente del comité, aseguró en la manifestación que la Junta, propietaria de Santana, tiene 'mejor talante' después de la reunión celebrada el sábado. No obstante, puntualizó que esa voluntad debe quedar plasmada 'en propuestas concretas, lo que al día de hoy no está'.

El jueves finaliza la extensión del plazo para las privatizaciones que ha dado Santana. Salazar recordó que sigue sin conocerse el nombre de las empresas que se harán cargo de las líneas de soldadura, utillaje y motores. Para las dos primeras sí hay negociaciones iniciadas con la Junta, según Salazar, y además estarían dispuestas a dar las mismas condiciones laborales que tiene Santana, pero en motores estaría vigente el convenio del metal, que tiene peores condiciones.

El presidente de Santana, Salvador Durbán, dijo que todos los empleados de Santana tienen opción a trabajar en las empresas privadas, pero también recordó que para los que no quieran pasar a este sector está abierta la opción de las bajas incentivadas.